La banca francesa se sitúa a la cabeza de las pérdidas europeas
En esta vorágine bursátil, la banca francesa destaca en la cabeza de las pérdidas. La noticia de que Moody's podría anunciar esta misma semana la degradación de las entidades galas ha encendido aún más los ánimos de los operadores que han castigado con saña al sector financiero del país vecino para hacerle ceder más de un 11%.
Ayer lo anunció Bloomberg y hoy han llegado las reacciones. Esta misma semana podría hacerse público el informe de la agencia de calificación Moody's en el que anunciaría la degradación de la nota de solvencia crediticia de las principales entidades galas que se encuentran en perspectiva negativa desde el pasado mes de junio. Esta situación sumada a la enésima tormenta bursátil a causa de la reaparición del fantasma griego ha puesto al borde del precipicio al sector financiero francés. Así, los operadores han castigado a BNP Paribas haciéndole perder un 12,3%, mientras Credit Agricole y Societé Generale se han dejado más del 10%.
Esta nueva debacle ha coincidido con el día en que la castigada Societé Generale ha presentado sus "planes de transformación para mejorar la solvencia de la entidad, incluyendo desinversiones en activos no estratégicos y recortes de plantilla, y hacer frente a la creciente incertidumbre y a la presión de los mercados". El envite de estos ha provocado que la cotización de la entidad gala se haya depreciado más de un 60% en lo que va de año. Para atajar esta debacle ha intervenido el presidente del Banco de Francia, Christian Noyer, que ha defendido la fortaleza de la banca gala para soportar cualquier "escenario que se pueda producir en Grecia.
La razón esgrimida por Moody's para la posible, y más que probable, rebaja de la banca del país vecino es "el impacto de un posible default griego o reestructuración y los actuales niveles de calificación de la deuda". Estas razones podrían ser aplicables también a las entidades alemanas que hoy tampoco se libran del castigo con Deutsche Bank y Commerzbank cediendo cerca de un 8%. Los inversores no ahorran esfuerzos en atacar al resto de la banca europea y en especial, como no, a la periférica. Los italianos Intesa San Paolo o Unicredit retroceden en torno a un 9% y el griego Alpha Bank se ha desplomado un 10%.
En España, dentro de la gravedad del momento, el sector financiero aguanta el tipo en comparación con sus colegas europeos, gracias en parte a su menor exposición a la deuda soberana helena. Los dos grandes, BBVA y Santander, han perdido un 5,3% y un 4,6% respectivamente. La banca mediana va un poco mejor aunque tampoco lanza cohetes. Sabadell ha retrocede un 3,2%, Popular un 3,3% y Caixabank un 2,9%.
Los seguros de impago de la banca también se disparan
Esta situación de alarma bursátil ha provocado también un incremento en el precio de los seguros de impago, los denominados Credit Default Swaps (CDS). Así, para cubrirse ante una emisión de deuda de 10.000 euros en letras a cinco años (plazo de referencia) la rentabilidad ha aumentado hoy más de un 10% para los bancos galos. Societé General tendría abonar 435 euros, 326 para Credite Agricole o 299 para BNP Paribas; comparando estos datos con las cifras que se registraban en el mes de junio se comprueba una revalorización de más del 150%. Por tanto, las probabilidades que asigna el mercado al default de la gran banca francesa se multiplica según avanza la crisis del euro.
En esta carrera tampoco se quedan atrás los bancos germanos que pagan ya más del doble de los que abonaban hace un par de meses por sus CDS. De esta forma, Deutsche Bank paga 216 euros frente a los 99 que pagaba en junio. La situación de Commerzbank es todavía peor con sus seguros cotizando por encima de los 310, muy cerca de los 346 en los que se encuentran los seguros que cubren al español Banco Santander.