La cuarta generación del móvil arranca en Madrid y Barcelona
Lanza un servicio en pruebas para grandes clientes y solo para tráfico de datos mediante 'pinchos' y 'routers'.
Telefónica da un paso adelante en el desarrollo de la cuarta generación de telefonía móvil. Su consejero delegado, Julio Linares, anunció ayer en su intervención en el seminario de telecomunicaciones que se celebra en Santander, que en los próximos días lanzará un nuevo servicio celular sobre su nueva red LTE, tecnología que soporta velocidades de más de 100 megas.
El nuevo proyecto se lanza con un criterio experimental en las dos principies ciudades españolas, Madrid y Barcelona. La tecnología de cuarta generación celular que se utilizará ha sido suministrada por la filial española de la compañía franco estadounidense Alcatel Lucent, según confirmaron fuentes familiarizadas con la operación.
En un principio las prestaciones que se comercializarán serán solo para tráfico de datos de grandes clientes, mediante pinchos USB y módems. Los beneficiarios serán las corporaciones empresariales y las instituciones públicas.
De momento quedan al margen los teléfonos móviles y los clientes particulares. En un primer momento la operadora utilizará el espectro que posee en la banda de 2,6 GHz y en 2010 la ampliar en el espectro en 800 megas.
En coherencia con esta iniciativa, Julio Linares, destacó la importancia de las nuevas redes móviles así como de la fibra óptica para adaptarse a los cambios y a las nuevas necesidades de los usuarios.
Con el propósito de impulsar mayores velocidades y mejoras de la calidad para adaptarse a las necesidades de los usuarios, Telefónica mantiene su objetivo de invertir 9.000 millones de euros este año.
Así, en la reciente subasta de espectro del Ministerio de Industria, Telefónica obtuvo cinco bloques de frecuencias, hasta un total de 70 megahercios (MHz), que supondrá para la compañía una inversión de 668 millones a pagar en dos plazos, septiembre de 2011 (el 53%) y junio de 2012 (el 47% restante). Para el directivo se necesitan mejores tecnologías móviles para hacer frente a los retos digitales europeos, así como estimular la demanda de nuevos servicios y la colaboración entre los distintos agentes del sector con el fin de lograr los ambiciosos objetivos de extensión de la banda ancha.
En concreto, el reto digital recoge que un 100% de la población logre una velocidad de 30 megas en 2020 y que, al menos, un 50% de los hogares pueda disponer de 100 megas en este periodo.