El Gobierno revoluciona la ESO para atajar el fracaso escolar
Abre itinerarios para potenciar la formación y la cultura emprendedora.
El Consejo de Ministros aprobará previsiblemente hoy dos reales decretos que modificarán el último curso de la enseñanza obligatoria, cuarto de ESO, y reformará la formación profesional (FP). Tras la publicación mañana de los mismos en el BOE, las comunidades autónomas podrán implantar alguna de las novedades en este próximo curso, pero será obligatorio para el periodo 2012-2013.
Con ellas, se pretende reducir la alta tasa de fracaso escolar español y motivar la actividad emprendedora. Educación reconoce que existen unas 900.000 personas de entre 18 y 30 años que se han salido del sistema educativo arrastrados por el boom inmobiliario y que hay que intentar que vuelvan. Para ello, se modifican los estudios en una edad clave: los 15 años. Para quienes estén motivados con el estudio, se convierte el cuarto de la ESO en un curso más atractivo, donde los propios alumnos eligen ya tres materias optativas que pueden ser la base de su vocación. A los que prefieran ponerse a trabajar, se les ofrecen los programas de cualificación profesional inicial (PCPI) con el objetivo de que no abandonen los estudios y tengan, al menos, un certificado de aptitudes.
Plan de empresa. Dentro de las materias optativas, los alumnos de cuarto de ESO podrán seleccionar una nueva asignatura: orientación profesional e iniciativa emprendedora, que contendrá incluso competenciasmatemáticas sobre creación de una empresa, viabilidad de la misma, cálculo de costes, realización del presupuesto de tesorería y balance y cuenta de resultados. Esta es una de las novedades, pero no la única. Los estudiantes de 15 años contarán con otras dos materias nuevas con las que podrán complementar el currículum obligatorio: alimentación, nutrición y salud y las ciencias aplicadas a la actividad profesional. Estas tres materias nuevas se agruparán por opciones.
El nuevo real decreto estipula que los alumnos sumarán a las obligatorias -lengua, idioma,matemáticas, historia, geografía y literatura (lengua de la comunidades autónomas)- tres optativas, que podrán ser o bien las tres de cada opción o, al menos, dos de una opción más otra de otro bloque.
En reuniones internas, las comunidades autónomas han valorado positivamente este cambio, aunque algunas se quejan de que poner en marcha este plan supondrá un aumento de los costes. No obstante, fuentes cercanas a Educación aseguran que su implantación no supondrá la contratación de un nuevo claustro de profesores ya que los que existen actualmente podrá impartir esas nuevas materias.
Otras de las medidas que contendrá el nuevo real decreto será la modificación de los programas de cualificación profesional inicial que permitirá que los alumnos de 15 años no tengan que repetir para acceder a estos cursos (actualmente deben ser repetidores si quieren cursar estos programas).
Además de estos cambios, el Gobierno se compromete a reforzar las medidas de información y orientación profesional, tanto para jóvenes como para adultos.
También se refuerza la colaboración entre la Formación Profesional de grado superior y la Universidad, y se incrementa la relación entre los centros de FP y las empresas. Todo para conseguir que en el año 2020, el 85% de los empleos tengan una cualificación media, como nos exige Europa, y no el 70% actual.
Los alumnos menos motivados estudiarán aparte
Los jóvenes que tengan menos disposición al estudio y que prefieran trabajar se les ofrecerá una alternativa. Ya con 15 años, no con 16, y sin que resulte necesario el requisito de haber repetido uno o dos cursos como ahora, podrán cursar los programas de cualificación profesional inicial (PCPI), que tendrá una duración de dos años o de uno, excepcionalmente, en caso de haber cumplido 16 años.El Gobierno pretende que los centros habiliten aulas ad hoc para este tipo de alumnos, y que sea el profesor y el colegio quien proponga al estudiante y a sus padres el desvío por este camino. Los programas contarán con tres tipos de módulos. El primero de ellos será específico para cualquier profesión de nivel 1, de la categoría de ayudante de técnico. El segundo módulo tendrá un carácter general y está pensando para dar acceso a la FP de grado medio. Y el tercer módulo, que será voluntario, pretende que finalmente el alumno termine la ESO. Gracias a estos programas, los alumnos podrán tener un certificado de competencias básicas.Actualmente, al no existir el graduado escolar, los jóvenes salen sin terminar la ESO y sin ningún tipo de título. Este certificado podrá convalidarse en el caso de que el joven quiera seguir estudiando la enseñanza obligatoria. Se trata, por tanto, de crear un sistema que permita la reflexión y la puerta abierta a quienes lo abandonan. El 15% de los estudiantes de enseñanza obligatoria repite un curso y el 24% repite dos cursos. Con este sistema, el Gobierno pretende que los alumnos que quieran trabajar hagan estos programas de tal forma y no pierdan el tiempo repitiendo.