La FIFA hace frente a su crisis cambiando la forma de elección del Mundial
La FIFA permitirá que las 208 federaciones que forman parte de la organización decidan qué países organizarán los Mundiales. La institución tomó ayer la decisión después de las duras críticas surgidas a raíz de la designación de los Mundiales de 2018 y 2022. El secretario general, Jérôme Valcke, incluso reconoció en un e-mail privado que Catar "compró" su victoria para organizar el de 2022. De esta manera, la FIFA copia al Comité Olímpico Internacional en su sistema de designación.
La asamblea de ayer fue la más agria de las que se recuerdan. Después del discurso inaugural del presidente Joseph Blatter, el responsable de la Federación Inglesa de Fútbol (FA), David Bernstein, lanzó un duro ataque por la situación actual de la institución y reclamó a los asistentes y al propio Blatter que se retrasase la celebración de los comicios para elegir un nuevo presidente para los próximos cuatro años. Que retrasase la proclamación de Blatter, se podría decir, dado que el suizo era el único candidato después de que su único rival, el catarí Mohamed bin Hammam (que también denunció a Blatter), fuese descalificado por el comité de ética a raíz de las acusaciones de sobornos.
Blatter, en cambio, sí pudo concurrir al ser absuelto por este mismo comité. Durante la asamblea se conoció que Bin Hammam ha podido presentar su apelación a la inhabilitación temporal que sufre, por lo que no ha podido participar en la asamblea. Según Bernstein, estos casos de soborno "preocupan a Gobiernos y patrocinadores" y han situado a la organización en el ojo del huracán.
Tras la intervención de Bernstein, Blatter recibió desde el estrado el apoyo de las federaciones menores, como las de Fiji, Túnez, Haití o Congo, que afirmaron que los problemas "han de ser solucionados desde dentro". Poco antes de intervenir el presidente de la FA, Blatter dio escasas muestras de estar dispuesto a renunciar a salir elegido. "Sabemos que la FIFA se mueve sobre aguas turbulentas, pero creo que este barco ha de ser puesto en la dirección correcta", dijo. "Soy el capitán ... y es mi deber y mi responsabilidad asegurarme de que volvemos a la ruta correcta".
Presidente por aclamación
En su discurso, Blatter aseguró ayer que la FIFA cuenta "con los más altos niveles de transparencia internacionales" y pidió que la asamblea le nombrase presidente por aclamación, para mostrar así su apoyo. Lo consiguió.La FIFA se ha visto envuelta en la última semana en acusaciones de soborno y amaño de la designación de los países organizadores del Mundial, algo que ha enfadado a la Federación Inglesa, la fundadora de este deporte, y ha inquietado mucho a sus potentes patrocinadores. Blatter rechazó que la elección de sedes estuviese comprada.