Blatter, reelegido como presidente de la FIFA
El suizo cumplirá su cuarto mandato tras obtener el 92% de los votos. El 61º Congreso de la FIFA rechazó la propuesta de Inglaterra de posponer la elección tras las acusaciones de soborno que rodean al organismo. En su discurso de apertura de la asamblea, Blatter se tuvo que defender del duro ataque lanzado por el presidente de la Federación Inglesa.
Joseph Blatter seguirá al frente de la FIFA, tras obtener 186 apoyos de las 203 asociaciones en el 61 Congreso del organismo que rige el fútbol mundial. Anteriormente se había rechazado la propuesta inglesa de posponer la elección, después de que salieran a la luz diferentes acusaciones de soborno que señalaban al que iba a ser el rival de Blatter en las urnas, Mohamed Bin Hammam, y que han llegado a salpicar al propio presidente electo.El secretario general, Jerome Valcker, incluso reconoció en un mail privado que Catar "compró" su victoria para organziar el de 2022.
La asamblea de hoy ha sido de la más agria de las que se recuerda. Después del discurso inaugural del presidente Joseph Blatter, el responsable de la Federación Inglesa de Fútbol (FA), David Bernstein, lanzó un duro ataque por la situación actual de la institución y reclamó a los asistentes y al propio Blatter que se retrasase la celebración de los comicios para elegir un nuevo presidente para los próximos cuatro años. Que retrasase la proclamación de Blatter, se podría decir, dado que el suizo era el único candidato después de que su único rival, el catarí Mohamed Bin Hammam (que también denunció a Blatter), fuese descalificado por el Comité de æpermil;tica a raíz de las acusaciones de sobornos. Blatter, en cambio, sí pudo concurrir al ser absuelto por este mismo comité. Durante el Congreso se ha conocido que Bin Hammamno ha podido presentar su apelación a la inhabilitación temporal que sufre, por lo que no ha podido participar en la asamblea.
Según Bernstein, estos casos de soborno "preocupan a gobiernos y patrocinadores" y han situado a la organización en el ojo del huracán. Tras la intervención de Bernstein, Blatter recibió desde el estrado el apoyo de las federaciones menores como las de Fiji, Túnez, Haití o Congo, quienes aseguraron que los problemas "han de ser solucionados desde dentro". Evidentemente, la moción inglesa fue rechazada.
Poco antes de intervenir el presidente de la FA, Blatter dio pocas muestras de estar dispuesto a renunciar a salir elegido en el día de hoy. "Sabemos que la FIFA se mueve sobre aguas turbulentas, pero creo que este barco ha de ser puesto en la dirección correcta", aseguró. "Soy el capitán [...] y es mi deber y mi responsabilidad asegurarme de que volvemos a la ruta correcta, y solo puedo hacerlo con las 208 federaciones nacionales". En su discurso posterior, Blatter aseguró que la FIFA cuenta "con los más altos niveles de transparencia internacionales y pidió que la asamblea le nombrase presidente por aclamación, para mostrar así su apoyo. Lo consiguió.
La FIFA se ha visto envuelta en la última semana de acusaciones de soborno y amaño de la designación de los países anfitriones del Mundial, algo que ha enfadado a la Federación inglesa, la fundadora de este deporte. Blatter rechazó que la elección de sedes estuviese comprada.