Los pepinos de la discordia
Las autoridades sanitarias de Hamburgo apuntan a dos empresas andaluzas del brote de Escherichia Coli responsable de tres muertos y 214 infectados en el norte de Alemania por el consumo de pepinos ecológicos. Sanidad, los exportadores y la Junta de Andalucía consideran precipatadas las acusaciones. Los horticultores bajo lupa aseguran que sus pruebas han dado negativo. Sus productos no se comercializan en España.
El sector hortofrutícola español teme por sus exportaciones a Alemania. En las últimas dos semanas, una serie de intoxicaciones alimentarias ha levantado el pánico, sobre todo en el norte del país: dos mujeres de avanzada edad y una joven de 24 años han muerto como consecuencia de hemorragias intestinales provocadas por la bacteria Eschericia Coli, y actualmente se conocen 214 casos de contagio.
Las investigaciones del Instituto de Higiene de Hamburgo dadas a conocer hoy señalan el origen infeccioso en pepinos ecológicos comercializados por dos empresas andaluzas. Al menos eso desprenden las pruebas realizadas sobre cuatro muestras escogidas al azar en el mercado central de Hamburgo, tres de las cuales corresponden a las partidas españolas. La encargada de comunicar los resultados a la opinión pública, esta mañana, ha sido la senadora de Sanidad de la ciudad portuaria, Cornelia Prüfer-Kochs.
La noticia ha sentado como un jarro de agua fría en España, pero nadie da peso a la acusación hasta que la Comisión Europea no emita un juicio definitivo sobre el asunto, del que ni siquiera ha levantado un estado de alerta. Las únicas declaraciones desde el organismo comunitario se limitan a asegurar que el problema "sólo afecta a Alemania por el momento". Sin embargo, Suecia también ha notificado diez casos, Dinamarca ha informado de cuatro , Reino Unido de tres y Países Bajos de uno.
El ministerio de Sanidad español precisa que "no hay información concluyente" respecto al origen del brote y confirma que no ha habido ningún caso de contagio en territorio español. Por su parte, la Junta de Andalucía tacha de "desacertadas, desafortunadas y precipitadas" las declaraciones de la senadora alemana.
Mientras tanto, la Federación Española de Productores Exportadores de Frutas y Hortalizas (Fepex) insiste en que "en principio no existe ninguna constatación oficial", y la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) advierte de "el daño que se puede producir al sector hortofrutícola español es tremendo y no solo para el pepino".
La versión del exportador
El portavoz de las autoridades sanitarias de Hamburgo, Rico Schmidt, ha identificado a la malagueña Frunet como una de las empresas bajo sospecha. Antonio Lavao, gerente del pequeño negocio, ha asegurado a Cinco Días que los análisis posteriores realizados sobre sus productos han resultado negativos y que el problema reportado por las autoridades alemanas pudo surgir en su territorio y no en el lugar de origen.
"Nuestro cliente en Hamburgo nos reclamó que la mercancía se había caído al suelo nada más salir del camión", explica Lavao. Su empresa exporta a países como Francia o Alemania, pero no vende en España. El horticultor cree que los agricultores alemanes están aprovechando el caos para relanzar el producto autóctono, ahora en campaña. "Ya lo han hecho otras veces", asevera.
La cadena mayorista alemana Metro ha retirado "por precaución" los pepinos orgánicos así como una pequeña cantidad de pepinos convencionales de España, aunque afirma desconocer qué partidas son las afectadas. Las autoridades alemanas siguen investigando "otras fuentes potenciales" del brote de bacteria, incluida "una tercera partida de pepinos sospechosos producidos en Países Bajos y comercializados en Alemania" que está siendo analizada.
En 2010, España exportó a Alemania un total de 142.772 toneladas de pepino. El grueso de la campaña se concentra en los meses de octubre a marzo, cuando se comercializan más de 20.000 toneladas de este producto.