Santander avisa de que aún debe reducirse más el crédito en España
España debe desapalancarse en lugar de pedir más crédito para salir de la crisis. Así lo hizo saber Santander por boca de su consejero delegado, Alfredo Sáenz. El mayor banco del país ganó a marzo 2.108 millones de euros, un 4,8% menos. La entidad confía en que su negocio doméstico se recupere conforme remita la guerra del pasivo y se estabilice la mora en otoño. De momento, Brasil y América Latina tiran del carro.
Santander aprovecha la diversificación geográfica y de actividades para mantener su velocidad de crucero. Durante el primer trimestre del año, la entidad mantuvo todos sus márgenes de negocio en tendencia positiva y registró unas ganancias de 2.108 millones de euros, apenas un 4,8% menos que en el mismo periodo del año anterior. La acción del banco subió ayer un 1,49% en Bolsa frente a un alza del Ibex 35 del 1,18%.
Sobre las cuentas pesa la situación que vive España, su mercado doméstico. Tal vez por eso buena parte de la intervención de Alfredo Sáenz, consejero delegado de Santander, giró en torno a la situación económica del país y de su negocio nacional. "España tiene un exceso de endeudamiento, tanto en el sector público como en el privado, y debe reducir el crédito a empresas y familias. A nadie nos gusta, pero es imprescindible". Con estas palabras explicaba el directivo por qué el saldo crediticio del banco cayó un 3,4% en este mercado. Y agregaba, "es un mito que la economía necesita crédito para salir de la crisis. Con financiación no se arregla nada, sino que se complican más las cosas". Sáenz estimó que España debe desapalancarse en un 30%. O dicho a grandes rasgos, reducir su endeudamiento en 300.000 millones de euros. Para ello será necesario que transcurra todo 2011 y, probablemente, 2012.
En línea con otros grupos nacionales, Santander vio como su filial doméstica reducía sus ganancias un 31,4%, a 274 millones. A esta cantidad se suma el beneficio de 101 millones de Banesto, que ganó el 50% menos.
El grupo dice que no hará prejubilaciones este año, lo mismo que en 2010
La llamada Red Santander y Banesto aportan hoy un 13% de las ganancias del grupo, frente al 24% que generaban hace tres años. Brasil casi duplica su contribución. Además, América Latina y Reino Unido la superan y Santander Consumer Finance (SCF) casi la iguala. A pesar de lo adverso de la situación, Sáenz echó un capote al negocio hispano. "Este es un mal momento. España tendrá más peso", aseveró.
El directivo fue más lejos durante su intervención y afirmó que "ganaremos bastante más dinero en España en banca comercial en 2011". Esto será posible por un cúmulo de factores. Por un lado, destacó que "se ha terminado la guerra de los depósitos". Santander, que atizó esa lucha en 2010 con un depósito al 4% TAE, espera renovar ahora el 70% de las imposiciones a un año que captó entonces. El consejero delegado vaticinó que los ingresos comerciales en el mercado doméstico mejorarán por las comisiones y la recuperación del margen de intereses a raíz de la subida de tipos.
Otro punto clave para que la Red Santander vuelva a rendir es la contención de la mora. Sáenz destacó cómo comienzan a descender las dotaciones netas (un 20% frente al cuarto trimestre de 2010) y predijo que la tasa de morosidad se estabilizará en el tercer trimestre del año. A cierre de marzo, los impagados representaban el 5,99% de la cartera de Red Santander por el peso de la actividad inmobiliaria. En este segmento, la mora alcanzó en marzo el 18,9%. Santander tenía concedidos créditos por 26.105 millones de euros ligados a actividades inmobiliarias. Es decir, unos 5.000 millones menos que al acabar 2009. Entre tanto, los inmuebles adjudicados mantienen su senda al alza y suman 7.882 millones al acabar el trimestre. Estaban cubiertos en un 32%. La tasa de mora del grupo en España se modera hasta el 4,68% al incluirse la actividad de banca mayorista.
Aunque el banco se muestra optimista sobre su evolución en España, reconoce que su situación macroeconómica es endeble. Aún así, rehusó contemplar la posibilidad de que el país deba solicitar ayuda para atender el servicio de su deuda. "España hace las cosas bien y lo normal es que no necesite el rescate. No creo que ese sea un escenario realista", dijo Alfredo Sáenz. Sin embargo, admitió que la elevada prima de riesgo de la deuda soberana hace que la economía nacional pierda competitividad y que a Santander le resulte más caro financiarse.
Brasil, la locomotora
Frente a las tribulaciones locales, las alegrías en Santander llegan del exterior. Ante todo destaca Brasil. Esta unidad incrementó su aportación en beneficios un 22,5% con carácter interanual. Aportó 732 millones de euros, casi el doble que España. La clave fue la marcha del margen de intereses y de las comisiones, junto a la reducción del coste del crédito. El Banco Central de Brasil ha promovido medidas para frenar la concesión de financiación ante la posibilidad de que se esté larvando una burbuja crediticia en ese país. Santander ha incrementado el crédito allí un 18%, pero Alfredo Sáenz descartó que exista tal peligro. El grupo echa toda la carne en el asador con esta filial. Los costes han subido un 12,7% por la apertura de 116 oficinas en 12 meses, el aumento de gerentes de empresas y las inversiones en la nueva plataforma tecnológica.
El resto de América Latina muestra una evolución similar a la de Brasil. Registra fuertes subidas del crédito y de los depósitos. Y tanto el margen de intereses como las comisiones dan muestras de fortaleza. Como colofón, las dotaciones disminuyen en la región.
En EE UU, Sovereign deja atrás los segmentos crediticios de mayor riesgo y reorienta su cartera. A marzo aporta unas ganancias de 128 millones de euros, un 59% más. Entre tanto, la presión regulatoria en Reino Unido (normas, liquidez, fondo de garantía de depósitos y tasa bancaria) ha hecho que el beneficio de esa filial menguara levemente (-2,2%) en moneda local. Aún así, Sáenz indicó que esta unidad mejorará su rendimiento conforme avance el año y confirmó que Santander mantiene sus planes de sacarla Bolsa.
Para concluir, el consejero delegado recordó que el banco avanza en su diversificación. Desde febrero consolida el banco que compró en Alemania al sueco SEB y el polaco Zachodni contribuirá a las cuentas en abril.
Al fin satisfecho con las cajas
Tras meses de beligerancia dialéctica con las cajas, Santander se muestra satisfecho con el resultado de la reforma del sector de ahorro. Alfredo Sáenz, consejero delegado del primer grupo bancario español, reconoció que "en un año se han hecho cosas muy importantes en este país".El directivo admitió que, bajo la directriz del Gobierno y del Banco de España, "se ha realizado una transformación radical del las cajas. Prueba de ello es la concentración de entidades que se ha dado y su práctica desmutualización".El directivo indicó que ahora comienza "una reestructuración grande en términos de capacidad instalada y eso es bueno para el sector financiero porque surgirá un gremio más racional, gestionado bajo criterios más económicos". Pero a pesar de la magnitud del proceso, el directivo descartó que vaya a resultar tan oneroso para las arcas públicas y traumático para la sociedad como lo fue la reconversión industrial de los ochenta.Sáenz eludió pronunciarse sobre Caja Mediterráneo (CAM), cuyo control tomará el Estado en breve. En cambio, se mostró a favor de que las cajas recurran indistintamente a esquemas de protección de activos, bancos malos o inyecciones de capital directas para sanear sus balances.
Temporal portugués
Santander Totta aguantará los rigores del rescate de Portugal. En el grupo destacan cómo la filial cuenta con una mayor calidad crediticia, eficiencia, liquidez y rentabilidad que sus rivales. La previsión es que siga generando beneficios en el futuro, aunque menores, y mantenga su solvencia.