Competencia investiga un mundo de Espada y Brujería
La Comisión abre un expediente sancionador por fijar los precios de venta de los sobres de cartas Magic.
La Comisión Nacional de la Competencia ha entrado en el mundo de las cartas coleccionables. El pasado martes anunció la apertura de un expediente sancionador (http://www.cncompetencia.es/Inicio/Noticias/tabid/105/Default.aspx?Contentid=313661&Pag=1 ) contra las empresas que venden el juego de cartas Magic. Según su nota oficial, "la Dirección de Investigación ha observado indicios racionales de infracción de la Ley 15/2007, de 3 de julio, de Defensa de la Competencia", y se abre un periodo de 18 meses para la instrucción del expediente y su resolución.
Magic es un juego de cartas situado en un mundo de "espada y brujería", creado en 1993 por el matemático Richard Garfield. Según su casa matriz, la estadounidense Wizards of the Coast, cuenta con seis millones de jugadores activos en todo el mundo. Wizards of the Coast, que también es dueña de franquicias como Dungeons & Dragons o el juego coleccionable de cartas de Pokemon, es actualmente propiedad de Hasbro, la empresa líder del sector del juguete a nivel mundial, que la compró en 1999 por 325 millones de dólares.
Las cartas pueden adquirirse como cromos, en sobres con seis unidades y composición desconocida -con un precio normalmente a partir de tres euros-, o en mazos preconstruidos. En una partida pueden usarse en principio cartas de cualquier idioma, aunque existe una edición en castellano que corre a cargo de la editorial especializada en juegos Devir.
Al no tratarse de productos culturales regulados, como los libros, no está permitida la fijación de precios de venta al público. Una posible razón para que se haya producido ese acuerdo, además de que el volumen del negocio es significativo -un comercio del sector estima que las ventas en España pueden rondar el millón de sobres anuales-, es que la edición española compite con la venta de cartas importadas en inglés, igualmente jugables, y que por lo general son más baratas al tener tiradas más altas.
El Magic consiste en el enfrentamiento entre dos y tres jugadores, cada uno con una baraja de al menos 60 cartas, que van llegando a la mano de juego de manera aleatoria. La composición de los mazos, siguiendo ciertas reglas, es decidida por el jugador, y depende en gran medida de su capacidad adquisitiva: algunas cartas aparecen con menos frecuencia en los sobres y tienen poderes especiales para el juego, y se cotizan de manera importante en los mercados de segunda mano.
El caso más conocido es el de la Black Lotus, una carta no reeditada desde hace quince años que viene a estar cotizada en torno a los 2.500 euros. También hay algunas cartas "de coleccionista", no jugables, que han obtenido precios más altos. Aunque la popularidad del juego es debida a que puede disfrutarse igualmente con un par de mazos básicos, con un coste de menos de 20 euros.
Existe un circuito de jugadores "profesionales", con torneos organizados por la propia Wizards of the Coast. El más numeroso celebrado jamás se disputó el año pasado en Madrid, con más de 2.000 inscritos. El ganador, el alemán Andreas Müller, se llevó una bolsa de 3.500 dólares.
Aunque Magic es el juego de cartas coleccionables más extendido en España y Estados Unidos, y sus sobres pueden adquirirse no sólo en puntos de venta especializados sino también en kioscos o librerías, existe otra media docena de competidores de este tipo. Los más difundidos en España son Yu-Gi-Oh!, de duelos de monstruos con estética manga -tiene el récord de 22.000 millones de cartas vendidas en todo el mundo-, o los de las franquicias de World of Warcraft y El Señor de los Anillos.