Las cuotas de la CAM sobreviven a la caída en desgracia de la caja
Las cuotas de la CAM han llegado a caer un 6,5% en su vuelta al parqué tras haber permanecido en subasta de volatilidad entre las nueve y las 12 de la mañana. Pero la situación se ha tranquilizado y han cerrado con un mínimo descenso del 1,74% y han cerrado en los 6,2 euros. La entidad alicantina podría necesitar 2.000 millones de ayudas públicas, lo que supondría la nacionalización, aunque en el mercado especula con que sea vendida después.
La Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) se propone solicitar el apoyo financiero del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), según comunicó esta noche la entidad alicantina a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en un hecho relevante. La intervención del FROB podría suponer una inyección de hasta 2.000 millones de euros, lo que implicaría su nacionalización, al menos temporal.
La noticia ha provocado una avalancha de órdenes de venta, que paralizaron la negociación de la CAM durante más de tres horas. El mecanismo de la Bolsa hace que los valores que sufren variaciones excesivas en el precio entren en subastas de volatilidad hasta que las variaciones se estabilizan.
Las órdenes de compraventa se equilibraron alrededor de los 4,8 euros por cuota a las 11 y media de la mañana. La amenaza de un hundimiento del 25% planeaba sobre la entidad. Pero los inversoes se tranquilizaron, la caja de ahorros volvió a cotizar con una relativamente moderada caída del 6,5% y cerró con un descenso del 1,74%, en los 6,2 euros. Las compras llevadas a cabo por el bróker de la propia CAM han evitado males mayores.
En el mercado se especula con la posibilidad de que el Banco de España intente después la venta de la entidad alicantina. En ese caso, fuentes financieras apuntan al Santader como uno de los más interesados, fundamentalmente para fusionar la caja con Banesto. La Caixa, BBVA y Popular, según otras mismas fuentes, podrían participar también en el proceso.
La decisión de pedir ayuda pública por parte de CAM se conoció poco después de rechazar Cajastur, Caja Cantabria y Cajas Extremadura el proyecto de segregación de sus negocios financieros a favor del Banco Base y su integración en el proyecto de fusión con la caja alicantina, previsto desde el año pasado.
En el comunicado enviado anoche a la CNMV, la CAM afirma que con el fin de pedir el apoyo del FROB, la entidad analizará con el Banco de España "la correspondiente estrategia y calendario de cumplimiento de los requisitos de capital", establecidos en el Real Decreto-Ley que regula el reforzamiento del sistema financiero. La caja señala además que "a la mayor brevedad posible" tiene previsto someterlo a su Consejo de Administración, que podría celebrarse hoy mismo.
Tras romperse el proyecto de fusión, el Banco de España pidió a la caja alicantina la inmediata presentación de un plan urgente de recapitalización. Cajastur, Extremadura y Cantabria seguirán en principio su proyecto juntas y pedirán al FROB 400 millones de euros.
Cajastur, Caja Cantabria y Caja Extremadura decidieron ayer en sus asambleas romper su proyecto de fusión con la CAM, que iba a dar lugar a la tercera caja española, lo que pone en entredicho el futuro de la entidad alicantina debido a sus dificultades y a unos niveles de solvencia muy por debajo de los requisitos del Gobierno.
La alianza de Banco Base arrancó oficialmente en mayo de 2010 y estaba destinada a generar una entidad con activos próximos a 130.000 millones de euros, de los que 70.000 millones correspondían a la CAM y el resto se repartían entre Cajastur, con un peso mayoritario (unos 39.000 millones), Caja Cantabria y Caja Extremadura.
Cuotas participativas
La caja debutó en Bolsa en julio de 2008 y desde entonces las cuotas han experimentado un comportamiento desvinculado del resto de la renta variable y del sector financiero. Con la caída de hoy la CAM perderá los 5,84 euros a los que fueron colocadas. El mínimo lo marcaron después de la quiebra de Lehman, en 4,776 euros.
La entidad es la única caja de ahorros con cuotas participativas cotizando el Bolsa. Se colocaron en el mercado en 2008, después de varios años de debate sobre la conveniencia de que las cajas tuviesen instrumentos de capital en el mercado. No obstante, ahorahan sido invalidadas como fórmula para capitalizar el sector y están condenadas a su desaparición. La CAM tiene en su mano la posibilidad de amortizar las suyas en "cualquier momento".
La reducida liquidez de las cuotas de la CAM es la causa de su baja vinculación a lo que haga el resto del sector financiero en Bolsa. En los últimos 12 meses, se han movido de media menos de 59.000 títulos al día, según Bloomberg.