El comité de empresa de Yamaha se querella contra la compañía por el robo de archivos informáticos
El comité de empresa de Yamaha ha presentado una querella ante el Juzgado de Instrucción de Sabadell (Barcelona) contra la dirección de la multinacional por un supuesto delito de descubrimiento y revelación de secretos, tras detectar el acceso sin permiso a los correos electrónicos de los representantes sindicales.
La querella se dirige contra el consejero delegado de Yamaha Motor España, el director de Recursos Humanos y el director de Informática de Yamaha España.
El documento relata que el pasado 9 de marzo el correo electrónico del comité de empresa y los correos personales de sus miembros, de la sección sindical de CC.OO. y demás trabajadores quedaron inutilizados, sin poder acceder a ellos.
Según el texto, el director de informática de la compañía, acompañado por dos personas desconocidas por los querellantes, manifestó que se estaba realizando una auditoría, tras lo que los representantes sindicales avisaron a los Mossos d'Esquadra ante la sospecha de que se estuviera accediendo a los correos electrónicos.
Según los denunciantes, de los hechos se desprende que "los querellados, con la ayuda de las dos personas no identificadas, procedieron a acceder al correo electrónico y archivos del comité de empresa, así como rastrear su correspondencia, todo ello sin el consentimiento de las personas afectadas, con la única intención de descubrir sus fuentes de información y estrategia a seguir ante el cierre de la empresa, lo cual puede ser constitutivo de un delito de descubrimiento y revelación de secretos".
Demanda por vulnerar derechos sindicales
El comité de empresa ha presentado también una demanda al Juzgado de lo Social de Sabadell por vulneración de derecho fundamental a la libertad sindical contra Yamaha Motor España en la vertiente de negociación colectiva, del derecho a la negociación de buena fe, sin condicionante ni maniobras por parte de la empresa para dirigir ese derecho.
El comité ha acordado interponer la demanda de tutela judicial "ante el acoso y coacción por parte de la empresa y quien la asesora -el gabinete Baker & McKenzie-, con la clara intención de provocar una situación de presión para conseguir que el comité de empresa se siente a negociar el expediente de extinción de contratos presentado por la empresa, dado que el comité ya ha manifestado que desea negociar la continuidad de la fábrica".
Yamaha se encuentra hasta el 2 de abril en proceso de consultas después de que la dirección presentara un ERE para despedir a 388 trabajadores de la fábrica de Palau-solità i Plegamans (Barcelona).
La sección sindical de CC.OO. en Yamaha ha reiterado en un comunicado que la dirección "carece de motivos legales para el cierre de la actividad productiva, por lo que ha pretendido comprar las causas".
"Podemos y vamos a demostrar con el contra informe todas y cada una de las falsedades que la empresa ha pretendido utilizar para engañar a la administración", ha reiterado CC.OO.