Ortega logra 2.121 millones vía dividendo de Inditex en los últimos cinco ejercicios
Inditex parece vivir en un mundo sin crisis. La multinacional disparó un 32% su beneficio en 2010, hasta los 1.732 millones de euros. Un resultado que le permite elevar un 33% la retribución a sus accionistas. El más beneficiado, su presidente, Amancio Ortega, que, vía dividendo, ha ingresado más de 2.121 millones en cinco años.
Si no fuera porque Pablo Isla -consejero delegado de Inditex- contestó ayer a preguntas sobre el futuro económico de España, los resultados del grupo gallego harían pensar que la multinacional no tiene que luchar contra los efectos de la crisis. De hecho, la Bolsa los aplaudió con una subida del 6%, la mayor del parqué madrileño.
La propietaria de Zara, Massimo Dutti y Bershka cerró el ejercicio 2010 (que concluyó el 28 de febrero) con unas ventas de 12.527 millones de euros, un 13% más que el año anterior. Mientras, el beneficio se disparó un 32% y alcanzó una cifra récord de 1.732 millones. Un crecimiento que Isla valoró positivamente y atribuyó a la diversificación geográfica que le ha llevado a colocar en Asia el punto de mira.
Gracias a este crecimiento, Inditex elevará un 33% la retribución a sus accionistas, hasta 1,6 euros por acción. El más beneficiado será su presidente y fundador, Amancio Ortega, que solo por los resultados de 2010 se embolsará más de 591 millones de euros. Ortega controla casi el 60% del capital de Inditex a través de dos sociedades (Gartler y Partler). Gracias a esta participación, ha logrado ingresar más de 2.121 millones de euros vía dividendo en los últimos cinco años.
Inditex dispara su beneficio en pleno proceso de sucesión, ya que a partir de junio Pablo Isla sustituirá a Ortega en la presidencia. En ella ejercerá labores ejecutivas, por lo que descarta que este movimiento suponga una revolución en la cúpula directiva del grupo. Reconoció que la "reorganización no será un cambio drástico" y explicó que la sucesión "se gestó de una manera muy natural, conversando con Amancio Ortega".
En cuanto a la evolución del negocio, Inditex está recogiendo los frutos de su apuesta por Asia, que ya representa el 15% de sus ingresos. Hace un año era el 12%. De hecho, China concentrará este año cerca de la cuarta parte de las aperturas previstas. En concreto, espera abrir 120 locales en el gigante asiático, mientras el rango de aperturas globales se situará entre las 460 y las 500, por encima de las 437 de 2010. A pesar de su clara apuesta por Asia, Inditex recalcó ayer la relevancia de España dentro de su modelo de negocio. Su mercado doméstico aporta el 28% de las ventas y mantuvo estables los ingresos a pesar de la caída del consumo. "Yo, de fondo, soy optimista con España", dijo Isla, valorando una posible reactivación del consumo. En cuanto a la subida de precios de las materias primas, Isla lo descartó.
Si se comparan los resultados de Inditex con los de sus rivales, el grupo español quedaría por detrás de H&M, beneficiado por la evolución de los tipos de cambio y por el calendario del grupo sueco, que cerró el ejercicio el pasado 30 de noviembre.
Todas las marcas en la red este otoño
La tienda online de Zara ya es la primera por volumen de ingresos, según señaló ayer Pablo Isla. Por detrás se sitúan dos locales de Zara en Italia, en Milán y Roma. El consejero delegado de Inditex se mostró cauto y no quiso desvelar cuantas ventas genera la web, que ya está operativa en 16 países europeos y que este año se lanzará en Japón y EE UU. Pero el verdadero desembarco de Inditex en la red será este otoño cuando comience a operar la tienda online de todas sus firmas.El grupo también está dando los primeros pasos para poner en marcha una nueva cadena de calzado, que complementaría a Uterqüe. Por el momento no hay ninguna decisión tomada e Isla no quiso precisar ni posibles fechas ni el concepto del local.Sí señaló que el grupo invertirá este año alrededor de 800 millones de euros. De ellos, el 80% se destinará a nuevas aperturas y reformas, mientras que el 20% restante será para mejoras logísticas. Entre las aperturas destaca el desembarco del grupo en Australia y Sudáfrica. El primero de ellos esta misma primavera con dos locales de Zara en Sídney y Melbourne. A Sudáfrica llegará el próximo otoño.