Las cinco claves del fondo de rescate
No queda mucho para que se cumpla un año desde que estalló la crisis griega y los gobiernos del euro tuviesen que idear un mecanismo de rescate de emergencia. Ayer, finalmente, los responsables del finanzas de los 17 países que comparten moneda, establecieron las bases para un mecanismo estable que funcione a partir de 2013.
æpermil;ste no ha respondido a las expectativas creadas, como la posibilidad de recomprar deuda en el mercado secundario.
En cualquier caso, las decisiones tendrán que ser refrendadas a finales de la semana en la cumbre europea. Las características principales del mecanismo que funcionará a partir de 2013, denominado Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) son éstas:
500.000 millones. La capacidad total del fondo será de medio billón de euros. Estará respaldado con 80.000 millones en metálico, de los que España aportará 9.500, y otros 620.000 en avales. La diferencia de estos 700.000 a los 500.000 de capacidad real de préstamo se debe a que, para que el fondo tenga calificación de triple A, hay que comprometer capital adicional.
Tipos de interés. El fondo prestará a un tipo 200 puntos básicos por encima de sus propios costes de financiación (es decir, del tipo de interés al que emite) para las emisiones a menos de tres años, y otros 100 puntos básicos para las emisiones a más largo plazo. Así, los préstamos serán más baratos de los que hace ahora el mecanismo de emergencia.
Compras de deuda. El fondo admite la compra de deuda en el mercado primario (esto es, directamente al Estado que la emite), pero no en el mercado secundario. Además, la compra de deuda tendrá que estar vinculada a un programa del FMI y la UE.
Quitas de deuda. En principio, el fondo intentará que los acreedores de países con unas finanzas "sostenibles" mantengan su inversión. Sin embargo, los países con niveles de deuda "insostenibles" tendrán que negociar con los tenedores de bonos quitas parciales de deuda para facilitar el rescate. Todas las emisiones de deuda europea a partir de 2013 tendrán cláusulas que eviten que una minoría de tenedores de bonos paralicen eventuales reestructuraciones de deuda.
Supervisión. El MEDE estará gobernado por los ministros de finanzas de la zona euro; e incluirá a externos como, por ejemplo, el presidente del Banco Central Europeo.