La triple vía de la intervención del Ejecutivo
El Gobierno quiere evitar que la crisis de Nueva Rumasa se le vaya de las manos. Por un lado, sus empresas comienzan a solicitar el concurso de acreedores, lo que podría facilitar, según los sindicatos, su salvación. En este proceso el Gobierno está atado de pies y manos. Sin embargo, sí puede actuar por una triple vía alternativa. La más visible la protagoniza el Ministerio de Trabajo que puede facilitar a través del Fogasa que los trabajadores cobren parte del sueldo que les adeudan las empresas de Nueva Rumasa. "Se va a tratar de generar un mecanismo rápido para dar cobertura de desempleo a los trabajadores que se vean afectados", explican fuentes de CC OO.
Mientras, el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino tratará de mediar para buscar alternativas que faciliten la viabilidad de aquéllas sociedades que logren salvarse. "El objetivo es mantener la actividad donde la hay y reactivarla donde no y eso no es fácil porque la titularidad sigue en manos de los Ruiz-Mateos", lamentan fuentes sindicales.
El próximo martes está prevista una reunión entre Ministerios, empresa y sindicatos. "Lo ideal sería lograr una positiva coordinación entre los Ministerios de Trabajo, Medio Ambiente y la Agencia Tributaria". Esta última es la tercera baza gubernamental, explican las citadas fuentes sindicales. "Que se trabaje activamente una vez vaya habiendo concursos para que Medio Ambiente favorezca nuevas inversiones y sea interlocutor con las comunidades autónomas porque estas empresas aún pueden encontrar propuestas sólidas y viables", recalcan. A su juicio, el principal escollo es la continuidad de los Ruiz-Mateos. "Los proveedores no quieren trabajar con ellos, porque no hay ningún tipo de confianza", critican. Una de las soluciones sería replicar lo ocurrido en el concurso de acreedores de Dhul, ya que el juez de Granada que tramita su suspensión de pagos decidió relevar a los Ruiz-Mateos de la gestión ante las dudas que generaba su continuidad.
"Hay que promover que se vayan realizando auditorías cuanto antes, porque las empresas van perdiendo mercado y clientela y se necesita confianza para poder recuperarla", recalcan. Sin embargo, las dudas continúan, ayer solicitó el preconcurso de acreedores Clecao, una de las sociedades patrimoniales de los Ruiz-Mateos especializada en inversiones inmobiliarias.