El sector del juego insta a modificar el sistema de concesión de licencias
El próximo 7 de marzo concluye el plazo de presentación de enmiendas a la ley del juego. La mayoría de los operadores reclaman suprimir el sistema de doble licencia (general y singular) que contempla el proyecto y sustituirlo por una simple concesión administrativa. De lo contrario, creen que se restringe el acceso al mercado.
Se van cumpliendo los trámites, aunque no los plazos. El Gobierno quería tener lista la nueva ley del juego antes del 31 de marzo, pero parece difícil que pueda lograr este objetivo. El próximo 7 de marzo concluye el plazo de presentación de enmiendas de un proyecto que pretende poner orden en un sector hasta ahora dividido. Por un lado, los operadores tradicionales (bingos, casinos...) ven cómo se contrae su negocio por los altos impuestos, la crisis y el crecimiento del juego online. Este último segmento que, sin marco legal, ha estado operando en España sin cumplir con Hacienda.
Pero el sector sí se ha puesto de acuerdo en un punto: el texto elaborado por el Ejecutivo no es el mejor para sus intereses. Ni para los operadores físicos ni para los online.
La principal crítica se centra en el sistema de concesión de licencias para poder operar en España. La ley establece dos tipos: generales y singulares.
Cualquier operador que quiera desarrollar loterías o apuestas en España de forma continuada deberá contar con una licencia general que concederá la futura Comisión Nacional del Juego a través de un concurso. Así se limitaría el número de operadores -previsiblemente cinco- que deberán tener un capital mínimo. Estas licencias solo serán válidas para un periodo de 15 años prorrogables una única vez. Además, deberán tener una licencia singular. Es decir, una para cada tipo de apuesta que oferten (cruzadas, de contrapartida...). Estas tendrán una duración mínima de un año y máxima de cinco y serán prorrogables por periodos de idéntica duración.
La mayoría de las grandes empresas del sector, como Bwin o Codere, así como la patronal del juego online (Aedapi) y la de las máquinas recreativas (Femara) han presentado enmiendas en contra de estas concesiones administrativas, según los documentos a los que ha tenido acceso este diario. Consideran que restringirá el acceso al mercado, en contra de los criterios que ha propuesto la Comisión Nacional de la Competencia (CNC). Por ello, proponen optar por una simple concesión administrativa sujeta al cumplimiento de los requisitos que establezca la ley.
Los operadores también reclaman poder homologar las licencias o títulos habilitantes concedidos en otros países de la Unión Europea. Algunos operadores también abogan por eliminar la exención fiscal de la que disfrutan Loterías y Apuestas del Estado (LAE) -en proceso de privatización del 30% de su capital- y la Organización Nacional de Ciegos (ONCE).
El previsible limbo legal del bingo online
Una de las críticas del sector del juego al proyecto de ley es la ausencia de una definición clara del bingo, uno de los juegos con más tradición en España. El texto define otras modalidades como las apuestas deportivas, hípicas, las rifas o los concursos, pero no el bingo. El sector teme que este se englobe dentro del concepto "loterías". Incluso, prevén que la futura Loterías y Apuestas del Estado (LAE) se reserve para sí la modalidad online del bingo. De ser así, algunos operadores no podrían desarrollar su actividad en España. Uno de ellos sería la empresa británica Rank, que en el mercado español logró el pasado año unos ingresos de 36,2 millones de libras (unos 42,6 millones de euros). Según los cálculos del sector el bingo reporta cada semana al Estado vía impuestos unos 13 millones de euros.