¿Qué es un plan de retribución flexible?
Qué le parecería que en su empresa se pusiera en marcha un plan por el cual pudiera percibir parte de su salario en efectivo en una serie de productos como un seguro médico, guardería, transporte y que obtuviera un importante ahorro de impuestos?
Los planes de retribución flexible en la actualidad consisten precisamente en eso, intercambiar salario en efectivo del trabajador por productos o servicios dentro de una cesta puesta a su disposición por la empresa. Es el trabajador el que está pagando esos productos, pero obtiene varias ventajas: la fiscal, la de comodidad en la contratación, la de contratar un producto colectivo (en vez de individual, con el consiguiente descuento), y además algunos de estos productos ayudan a mejorar la conciliación de la vida profesional y personal y se ajustan mejor a su situación personal y familiar en cada momento.
Los productos que se incluyen habitualmente en estos planes son los que tienen ventajas fiscales: tiques restaurante, seguro médico, guardería, ordenadores y ADSL (solo para 2011), formación, entrega de acciones, plan de pensiones y el bono transporte (importante novedad para este año). También hay otros productos con tratamiento fiscal ventajoso que se incluyen en estos planes: el alquiler de vivienda, renting de vehículo o el seguro de jubilación. Además, se puede incluir cualquier otro producto que pueda ser interesante para los trabajadores -aunque no tenga ventaja fiscal-, como el seguro de vida, cuota gimnasio, etcétera.
Como resultado del estudio reciente de KPMG, se ha constatado que los planes de retribución flexible se siguen implantando en España con éxito en estos últimos años. Las ventajas para una empresa de poner en marcha un plan de retribución flexible son muchas: ofrecer a sus trabajadores un beneficio que no suponga un coste retributivo para la empresa, mejorar la imagen interna y externa de la compañía -con la consiguiente mejora en el clima laboral, retención de profesionales y contratación de nuevos empleados-, mejorar la comunicación de la retribución y beneficios a los empleados, mejora de la productividad lo que lógicamente tendría que conllevar a la mejora de resultados.
En mi opinión, los planes de retribución flexible tienen todavía un gran recorrido en España, sobre todo en la situación actual -de moderación de los incrementos salariales y de ausencia de iniciativas para mejorar la política de beneficios sociales-. Medidas de este tipo suponen una propuesta muy atractiva para los trabajadores y empresas, sin incrementar los costes retributivos de estas últimas y constituyendo una herramienta clave para mejorar la imagen de la empresa. Además, ya hay mucho camino recorrido, tanto en la práctica de su implantación como en el conocimiento de sus implicaciones laborales, fiscales y en su administración y gestión gracias a las nuevas tecnologías que han simplificado enormemente estas tareas.
Ana del Solar. Directora de Tributación Personal de KPMG Abogados