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Alaba que la ley impulse la competitividad

Competencia critica la exención de impuestos de los premios de Loterías

La Comisión Nacional de la Competencia (CNC) cree que la nueva ley del juego no debería permitir a Loterías y Apuestas del Estado (LAE) la exención de impuestos de la que goza y que no se aplicará al resto de operadores nacionales. La CNC considera que LAE gozará de una ventaja competitiva frente a sus competidores.

En solo unas semanas la nueva ley del juego comenzará su tramitación en el Congreso de los Diputados y, a día de hoy, muy pocas son las voces que apoyan el último -y parece que definitivo- anteproyecto de ley. Una de las discrepantes es la Comisión Nacional de la Competencia (CNC).

En líneas generales, el regulador alaba la necesidad de crear un marco regulador que favorezca la competencia en un sector hasta ahora dominado por Loterías y Apuestas del Estado (LAE). A través de la nueva ley, LAE se dividirá en un organismo regulador (la Comisión Nacional del Juego) y una sociedad estatal con participación privada, que podrá alcanzar hasta el 30%. La CNC considera que el anteproyecto de ley del juego podría favorecer a LAE frente a sus futuros competidores privados. El regulador apunta que LAE puede verse favorecida por la exención de impuestos, de la que no dispondrán el resto de operadores de juego cuyo ámbito supere el territorio de una comunidad autónoma.

"Los operadores que se ven favorecidos por este diseño LAE podrían utilizar la ventaja de las rentas que van a retener como consecuencia de esta exención para hacer más atractiva su modalidad de loterías tradicionales frente a otras modalidades", explica la CNC en su informe. "Incluso, para mejorar su posición competitiva en las modalidades abiertas al mercado en las que participen en competencia directa con otros operadores".

Por ello, Competencia "propone reconsiderar la conveniencia de mantener la exención de este tributo en los términos establecidos por el anteproyecto de ley y solicita una adecuada fundamentación de las razones a que obedece la distinta carga fiscal soportada entre modalidades". De hecho, la gran mayoría de operadores (bingos, casinos o apuestas deportivas) critican que el Ejecutivo haya optado por diferenciar la carga fiscal de cada tipo de juego porque consideran que dificultaría la competitividad respecto a otros operadores europeos.

En este sentido, la CNC cree que la diferente fiscalidad "también puede impactar sobre las futuras condiciones de competencia en el sector, en la medida en que el acceso a las actividades liberalizadas resulte más fácil a los operadores tradicionales que al resto", apunta en el informe. Por ello, la CNC cree que se debería "precisar el grado de aplicación a estos operadores de las condiciones de acceso a estas modalidades previstas en la futura ley".

Cómo gestionar la privatización parcial

El esquema de privatización parcial de LAE es uno de los puntos a definir en la nueva ley. Por el momento, sigue sin definirse si se optará por una colocación en Bolsa a particulares, mediante la entrada de inversores privados o por el capital riesgo, aunque esta última posibilidad parece haber perdido peso. La Comisión Nacional de la Competencia cree que habría que vigilar la identidad de los futuros inversores. "Se debería tener en cuenta la posibilidad de que la entrada de nuevos operadores de juego en el capital privado de la nueva sociedad la futura LAE cree vínculos estructurales entre operadores competidores, con objeto de considerar la conveniencia de establecer medidas que corrijan las consecuencias para la competencia de este riesgo", asegura en su informe.

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