Mas anuncia que el déficit catalán de 2010 triplicará el previsto por Montilla
El presidente de la Generalitat catalana, Artur Mas, cifró ayer el déficit heredado del tripartito en más de 7.000 millones, tres veces por encima del previsto. Para recortarlo prevé dos años de duros ajustes, para retomar las inversiones en 2013.
El mensaje del presidente de la Generalitat catalana, Artur Mas, tras la segunda reunión del Consejo Ejecutivo de la legislatura recién estrenada fue la aprobación de una reducción del 23% de la estructura directiva de la administración. Este es el segundo ajuste anunciado, después del recorte inicial de 15 a 12 departamentos.
"Ahora se reducirán los altos cargos de 177 a 136", concretó Mas ante la prensa. El mensaje de austeridad prometido en la campaña electoral se completará en varias fases. Mas habló de una disminución del personal eventual en un plazo de tres semanas, y señaló que en dos meses perfilará la reducción de los estamentos por debajo de las direcciones generales.
En una quinta y ultima fase que culminará el primer semestre, el ejecutivo catalán consolidará el número de empresas y organismos autónomos dependientes de la Generalitat. Por su parte, el jefe de la oposición y portavoz del PSC, Joaquim Nadal, cifró que los recortes anunciados apenas supondrán un ahorro de 10 millones de euros.
En cualquier caso, Artur Mas destacó que la política de ajustes en la administración durará dos años, para "recuperar las inversiones en 2013". El presidente catalán afirmó que la situación se ha deteriorado en los últimos meses, "no solo por el gasto sanitario", reconociendo que el déficit de 2010 se situará entre "dos y tres veces por encima" de lo anunciado en la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera del pasado 24 de noviembre (a cuatro días de las elecciones catalanas), que rondaba el 1,24% del PIB para todas las autonomías. Esto supondría superar los 7.000 millones de euros en 2010.
Mas se limitó a especificar estas cifras en las próximas semanas y añadió que todos los esfuerzos se centrarán en conseguir el objetivo de cerrar 2011 con un déficit del 1,3% del PIB es decir, situarlo en los 2.600 millones. En su primera rueda de prensa como presidente, pidió políticas conjuntas con el Estado para frenar el deterioro de la situación y evitar que "se centrifugue el déficit a las autonomías". Preguntado sobre la posibilidad de repetir la experiencia de emitir bonos para particulares, Artur Mas indicó que "probablemente" utilizará esta fórmula, dependiendo del nivel de apertura de los mercados financieros y con "más tiempo y precios más razonables".
La cifra
2.600 millones de euros es el objetivo de déficit fijado para el presente ejercicio, lo que supondría cumplir con el 1,3% sobre el PIB catalán.
La eliminación de sucesiones evitará la fuga de inversiones
La voluntad de suprimir el impuesto de sucesiones no se realizará para beneficiar a determinadas capas sociales (en clara referencia a lo que defiende el líder de ICV-EUiA, Joan Herrera), sino que "pretende evitar que se trasladen inversiones a otras partes de España, y en concreto a Madrid", remarcó Artur Mas. "Con la actual crisis económica solo faltaría que además algunos patrimonios se vayan fuera de Cataluña porque pagan menos".El presidente de la Generalitat indicó asimismo que en las próximas semanas el departamento de Economía de Andreu Mas-Colell encargará un estudio comparativo con las otras comunidades autónomas para determinar en cuál de ellas la situación es más ventajosa para el contribuyente, lo que supondrá la práctica supresión del gravamen en Cataluña.