Accidente en el Banco de España (2)
Decíamos ayer que la quiebra repentina de las nobles patas de la vetusta mesa del comedor del Banco de España que daba de almorzar a los gobernadores latinoamericanos el pasado día 10, acompañados y apadrinados por el presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, y el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, no había causado heridos, aunque momentáneamente la pesada plataforma dorada se alojó sobre las rodillas de los excelentísimos comensales.
Tras la sorpresa general de los invitados y el sonrojo inevitable de los anfitriones, no se encontró solución urgente más prosaica que sustituir las tullidas patas de la mesa por la vigorosa textura de unas cajas de mandarinas de La Plana. Para evitar males mayores, se aligeraron el café, los licores y los mazapanes navideños y, con ellos, la sobremesa.