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Los piídos de Van Rompuy

El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, ha decidido utilizar los servicios de una empresa estadounidense con sed de lucro para adelantar en exclusiva los acuerdos alcanzados por los líderes de los 27 gobiernos de la UE. Curiosa iniciativa que puede tener varias explicaciones y que lleva a preguntarse, como hacen los Tom Tom Club, "¿qué valor tienen las palabras?".

Explicación más inocente: las nuevas tecnologías avanzan en el Viejo Continente. ¡Qué guay!

Explicación más institucional: Bruselas se esfuerza por conectar con los ciudadanos. ¡Viva la UE!

Explicación más maliciosa: Van Rompuy se aburre tanto con un cargo sin funciones claras que se pasa el día flotando por Internet. ¡Pobre hombre!

Explicación más retorcida: el gabinete del exprimer ministro belga, dirigido por un "pro-americano" según los cables de Wikileaks (ver punto 9), se dedica a hacer propaganda de Twitter en un momento en que la compañía está buscando atraer inversores y convertirse en el úlitmo pelotazo (en el buen sentido) de las empresas nacidas al calor de Internet. ¡Vaya conflicto de interés!

Explicación más plausible: el presidente del Consejo, como la mayoría de los políticos que pululan por las redes sociales, no ha puesto nunca una letra ni en Twitter ni en Facebook. Son sus empleados, que se hacen pasar por él. ¡Qué ocurrentes!

Explicación más sencilla: el equipo de Van Rompuy no se ha percatado de que Twitter es un canal privado de comunicación al que ningún ciudadano europeo tiene obligación de pertenecer y cuyos usuarios no pueden tener un trato privilegiado por parte de los poderes públicos.

En el Consejo Europeo me dicen que las entradas de HVR en Twitter están abiertas a todo el público porque se cuelgan en la página web de la institución. No me convence la explicación, la verdad, aunque puedo estar equivocado.

Por lo pronto, esas entradas sólo están en inglés, una lengua que no entienden todos los ciudadanos y que al propio HVR le fatiga hablar.

Y, sobre todo, me pregunto qué pasaría si a continuación decidieran, por ejemplo, enviar los correos electrónicos sólo a quienes tengan una dirección en gmail. O los SMS a los clientes de Vodafone. ¿Y por qué no colgar el Boletín Oficial de la UE en Facebook, dejando fuera a los usuarios de Tuenti?

En un Twitter reciente (15/12/10, a las 09:39:55), HVR felicitaba a la comisaria europea de Agenda Digital, Neelie Kroes, por su plan de acción de eGoverment para 2011-2015.

Si el presidente del Consejo ha leído ese documento, habrá visto que uno de los objetivos es "no dejar atrás a ningún ciudadano". Y si conoce los planteamientos de Kroes sobre Internet sabrá que la holandesa es una firme partidaria de mantener la neutralidad de la red, sin permitir que operadoras o proveedores de servicios la fragmenten para aislar a sus clientes y obtener mayores beneficios.

Dicho queda pues. Sin acritud ni hacia HVR ni hacia Twitter, que me parece una excelente opción para compartir, como dicen los Tom Tom Club, "palabras que reconfortan / palabras de paz / palabras que matizan / y palabras de romance que emocionan". Pero no anuncios oficiales.

Disfrutad el excelente vídeo y que alguien, por favor, se lo repíe a Van Rompuy, que hoy estará en casa descansando después de dirigir la agotadora cumbre europea de ayer y anteayer.

La letra esta tomada de LyricsFreak.

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