Toxo amenaza con otra huelga general en enero
El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, advirtió hoy de que en enero habrá una nueva huelga general si el Gobierno no retira su propuesta de elevar la edad legal de jubilación a los 67 años.
Toxo hizo estas declaraciones a la prensa minutos antes de participar en la manifestación que, junto con UGT, CCOO ha convocado en Madrid este mediodía, bajo el lema "La movilización continúa. Recuperar derechos, defender el estado social y no a la jubilación a los 67 años".
Según Toxo, las próximas semanas "son claves" para determinar si habrá otra huelga general después de la del pasado 29 de septiembre.
Por su parte, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, consideró que la propuesta del Gobierno de situar la edad legal de jubilación en 67 años es una "línea roja" que dificulta la posibilidad de llegar a un acuerdo, tanto en el ámbito parlamentario como en el diálogo social.
Por ello, vinculó la posibilidad de un acuerdo a que el Gobierno retire esta propuesta, que calificó de "medida injusta e innecesaria".
Además, el secretario general de UGT consideró "lamentable" que el Gobierno haya decidido "imponer recortes laborales y sociales" a la ciudadanía, por su "incapacidad para frenar el feroz endeudamiento" de las entidades financieras en el sector inmobiliario, algo, que denunció, se ha producido con "la mirada complaciente del Banco de España".
Respecto a las declaraciones hechas ayer por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, acerca de que la elevación a los 67 años sea con "flexibilidad", Méndez dijo que no les han tranquilizado, sino que, al contrario, les han generado "una gran preocupación", por lo que reiteró el rechazo de los sindicatos a esta iniciativa.
Méndez aprovechó para utilizar un símil al respecto, y explicó que, si se acepta un golpe con "un palo rígido", se provoca una "magulladura", pero si se hace con "un látigo", que es algo "más flexible", se puede provocar "el desgarro de la carne".
En este sentido, Toxo avisó de que la imposición generalizada y obligatoria de los 67 años es la "frontera entre el acuerdo y el desacuerdo, entre la paz social y el conflicto".
Según denunció, el Gobierno hace esta propuesta como "ofrenda a los mercados" cuando Zapatero sabe que "en solitario no puede hacerlo, y necesita votos suficientes en el Parlamento".