El complicado caso de Hochtief y ACS
Hochtief tiene que dar algunas explicaciones. Pocos días después de que el grupo constructor alemán vendiera, con un descuento, una participación del 9,1% al emirato de Qatar, su segundo mayor accionista ha acusado a la compañía de entregar las acciones a un precio "notablemente" inferior al valor intrínseco de Hochtief.
El inversor, Southeastern Asset Management, ha pedido también la dimisión del consejo de administración. Eso puede ser extremo, aunque no menos importante, ya que podría desestabilizar la empresa cuando lucha contra una oferta de compra no solicitada por la española ACS. La valoración de Southeastern sobre el valor real de Hochtief parece optimista. La dirección de Hochtief tiene aún que convencer sobre el pacto con Qatar, que parece más una medida encubierta para frenar a ACS.
La posición de Southeastern es complicada ya que es también uno de los mayores accionistas en ACS. Pero difícilmente se ajuste a la española, ya que Southeastern ahora dice que Hochtief vale 95 euros por acción frente a los 57,1 euros acordados con Qatar. El valor es más alto que las estimaciones de los analistas. UBS, por ejemplo, aplica un descuento del 20% para alcanzar el precio objetivo de 69 euros por acción. Si es así, el valor de mercado de Hochtief ni siquiera ha estado tan alto desde 2008.
Si se puede discutir algunos puntos de la valoración de Southeastern sería el argumento sobre la credibilidad de Hochtief. La compañía dijo recientemente que las acciones estaban por debajo de su valor cuando se negociaba a 62,80 euros. El pacto con Qatar es menos contradictorio. Lo que no está claro es por qué la alemana no utilizó sus 3,4 millones de acciones en tesorería en lugar de crear de nuevo 7 millones. La conclusión: Hochtief no ha justificado por qué necesita más capital cuando tiene el ratio de deuda más bajo del sector.
La normativa alemana permite a ACS comprar acciones en el mercado una vez que se acepte su oferta formal. Esto puede ser ahora más difícil porque las acciones de Hochtief se han elevado un 15% desde la primera oferta de ACS. Pero la española puede dejar que ésta se desvaneciera y volver con otra el año próximo. La alemana no puede ignorar el reclamo de Southeastern.
Fiona Maharg-Bravo