Zapatero descarta que los bancos españoles necesiten una inyección de capital
Los bancos españoles no necesitan inyección de capital alguna, ya que "se encuentran entre los mejores de Europa" y la legislación que los regula es "quizás una de las más restrictivas de los países desarrollados", aseguro el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
En una entrevista difundida hoy parcialmente por la cadena estadounidense de información financiera CNBC, Zapatero reconoció sin embargo que el país "necesita" aumentar la inversión extranjera y las exportaciones, y que "el gran problema" con el que ha de lidiar es la elevada tasa de desempleo, en torno al 20%.
El mandatario español, que concedió esta entrevista aunque CNBC la ha fragmentado en varias emisiones, trató así de calmar a los inversores estadounidenses, que en los últimos meses han centrado su atención en los supuestos problemas de solvencia de la deuda de algunas economías europeas.
Respecto a la principal preocupación de los mercados, los supuestos problemas de solvencia crediticia, Zapatero se mostró categórico a la hora de garantizar que los titulares de bonos de deuda pública española no tendrán que afrontar recortes de valor.
"Ha sido una tradición de los bonos españoles, que están entre los mejor valorados del mundo. Eso se va a mantener por encima de todo, se diga lo que se diga. Los buenos inversores, los que siempre han trabajado con nosotros, lo saben", defendió.
En cuanto a la salud de los bancos, y en concreto a la afirmación de algunos analistas de que las entidades españolas podrían tener que amortizar activos relacionados con el mercado inmobiliario por unos 50.000 millones de dólares, sentenció que "no tiene base alguna". "España es de los países europeos el que ha tenido que inyectar menos capital que nadie en su sistema financiero. Ha sido apenas el 1% del PIB, menos que Francia o Alemania", apuntó.
A ello se suma, que "la regulación española es la más restrictiva" y "quizás" la que más provisiones exige a sus bancos de todos los países desarrollados, ya que, según explicó, se les reclama que "cada vez que haya una operación inmobiliaria se aplique un nivel de reservas del 33%".
"Así, aunque baje mucho el precio del suelo, las provisiones ya están ahí, en garantía de la salud financiera de los bancos. Esto es algo que la gente olvida", dijo Zapatero, quien reconoció que lo que necesita España es más inversión extranjera y exportaciones.
æscaron;litmas medidas
Sin confirmar si ha establecido contactos al respecto con fondos soberanos de Asia, Oriente Medio o Rusia, Zapatero recordó que para aumentar el atractivo de España para el capital extranjero se han impulsado bajadas de impuestos para empresas, privatizaciones y medidas para flexibilizar la legislación laboral.
"El gran problema es el paro", aseguró Zapatero, quien quiso recordar que España es el país donde más rápidamente ha crecido la población activa, ya que "en 10 años han venido a trabajar casi 5 millones de personas" a un país con 41 millones de habitantes.
En un momento de la entrevista que no fue emitido ni hoy ni el miércoles, a Zapatero se le pregunta si cuenta con el apoyo de la oposición y si "el partido conservador sabe lo que se debe hacer", según la transcripción de ese encuentro informativo.
"Nos encantaría contar con el apoyo a nuestras reformas del Partido Popular. Creo que sería muy bueno para crear confianza en España y estoy tratando de lograrlo. Pero a menudo ocurre que no tienen valentía para hacerlo. Espero y confío en lograr ese apoyo", contestó Zapatero, quien apuntó que "mezclan la política con las necesidades nacionales".
Zapatero, quien también abogó por la necesidad de una mayor integración fiscal en la UE, aseguró tener "muchos argumentos" para calmar a los inversores, especialmente en lo que se refiere al déficit, que recordó que es del 60% (20 puntos menos que Alemania, Francia y la media europea) y al sistema bancario.
"Nuestro plan para reducir el déficit -dijo- se está manteniendo estrictamente. Además, reformamos las instituciones financieras, se redujo el número de cajas de ahorro de 41 a 17 con gran rapidez y se reformó la manera en que operan para dar cabida al capital privado".
Esas medidas, así como las anunciadas el miércoles en España relativas a la privatización parcial del aeropuerto de Barajas (Madrid) y el del Prat de Llobregat (Barcelona) y de la lotería nacional, "buscan generar confianza y crecimiento", así como "estabilidad financiera y seguridad", que "están garantizadas por España, incluso pese a los temblores que hemos sufrido por la crisis irlandesa".
En cuanto al ritmo de recuperación de la economía, Zapatero apuntó que en los tres últimos trimestres se han visto "algunos signos positivos".