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Columna
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Más vale tarde que nunca

Parece que Madrid tenía un Plan B después de todo. Tras decir que no eran necesarias más medidas, el Gobierno venderá participaciones en la Lotería y los aeropuertos, además de laminar los beneficios a los parados.

La Lotería estatal ha sido una tradicional fuente de ingresos y espera obtener con la venta del 30% entre 4.000 y 5.000 millones. La venta de los aeropuertos será más compleja, ya que incluye ofertar una concesión por los aeropuertos de Barajas y el Prat. A pesar de que hay muchas incógnitas acerca de la estructura, la posible venta ha despertado gran interés en las empresas y fondos de infraestructuras. El 49% de los aeropuertos podría valer entre 8.000 y 9.000 millones, según fuentes gubernamentales. El nuevo paquete de medidas, que incluyen una rebaja de impuestos a las pymes, reducirán la emisión de nueva deuda en un tercio. El Tesoro solo necesitará entre 30.000 y 31.000 millones en 2011, frente a los 45.000 millones previstos. Por supuesto, España necesitará refinanciar también 150.000 millones, por lo que seguirá dependiente de los mercados. Estas medidas muestran que España tiene margen para reducir el déficit sin asesinar el débil crecimiento. El Gobierno reducirá los impuestos a las pequeñas empresas, con la esperanza de estimular la actividad, al tiempo que mete el hacha en los 426 euros para los parados de larga duración.

Dependiendo del crecimiento de 2011, Madrid quizá tenga que continuar con más medidas para reducir el déficit al 6%. Asimismo, debe atenerse al Plan A, que incluye las reformas de las pensiones, del sistema financiero y la laboral, en particular la negociación colectiva.

Las medidas van en la dirección adecuada, pero Zapatero debería estar más atento para anticiparse a los mercados en el futuro, en vez de reaccionar ante ellos.

Por F. Maharg-Bravo

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