Los analistas esperan un mensaje claro del BCE que dé tranquilidad a los mercados
La reunión de consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE) de mañana jueves debería servir para que lance un mensaje "claro" que consiga dar tranquilidad a los mercados, según los analistas consultados, que, sin embargo, difieren sobre las medidas concretas que podría tomar la institución presidida por Jean Claude Trichet para ayudar a poner fin a los problemas que atraviesa la eurozona.
La analista de IG Markets Soledad Pellón espera que de la próxima reunión del BCE salgan, más que cambios concretos en términos numéricos, "mensajes de tranquilidad con palabras muy medidas". Así, no contempla una bajada de tipos, pero quizás sí un anuncio de recompra de bonos de estados periféricos, que incluso podría haberse iniciado ya.
Sin embargo, reconoce que Trichet tendrá "un trabajo complicado" a la hora de calmar a los mercados, que esperan "algo más que un discurso tranquilizador y que probablemente se quedarán con las ganas de conocer medidas concretas". Además, no prevé retirada de estímulos o anuncios en este sentido, ya que podría afectar negativamente a un mercado que está a la espera de cualquier noticia negativa "para desatar el pánico de nuevo".
En este sentido, Pellón considera que lo importante es que el BCE zanje el tema de la "posible quiebra de España" y defienda que eso es "imposible", ya que no hay fondos para comprar la deuda necesaria para relajar la presión sobre España. En su opinión, una recompra en el mercado secundario dejaría ver que se está "actuando con rapidez y podría quitar parte de hierro al asunto".
Por su parte, Ignacio Cantos, de Atlas Capital, espera que Trichet hable de mantener los tipos en niveles bajos durante un tiempo prolongado, así como que anuncie la ampliación de las subastas de liquidez, que en principio finalizaban este mes de diciembre, yque incluso ponga en marcha una subasta anual. De esta manera, serían los bancos los que compraran la deuda soberana, lo que ayudaría a relajar las presiones.
Cantos considera también que la intervención de Trichet ira en línea con la realizada este martes en el Parlamento Europeo, donde criticó las posturas que están manteniendo los mercados en la crisis de la eurozona y, aunque rehusó dar detalles del programa de compra de bonos de la institución porque eso corresponde al consejo de gobierno, recordó que éste sigue en marcha.
En cambio, desde Selfbank no esperan que se anuncie ninguna medida nueva o diferente, aunque apuntan que se podría estudiar de forma independiente la situación de cada país con su propia problemática. Respecto a los tipos, afirma que se van a mantener en el mismo nivel, porque no podría permitirse el lujo de bajarlos dado que hay países que están funcionando mejor que otros, algo que está abriendo la "brecha" que existe entre las dos Europas.
Victoria Torre, de Selfbank, espera que Trichet que lance un "mensaje claro" a los mercados porque la incertidumbre y el miedo al contagio están perjudicando "de forma extrema a las bolsas europeas". Así, señala que, aunque parecía que la lista estaba cerrada, "han aparecido nuevas apuestas como Bélgica" y las dudas sobre España están llevando a la prima a niveles récord desde a la puesta en marcha del euro.
"Es necesario que se restablezca la confianza, porque en el caso de España hemos visto como el bono a diez años ha superado el 5,7% y por encima del 5% ya estamos hablando de un nivel peligroso. La situación ha empeorado dramáticamente", advierte.
Coordinación con la UE
Por su parte, los analistas de Inversis Banco consideran "clave" una actitud decidida desde el BCE, que esté coordinada con la Unión Europa. "En este último coletazo de la crisis, el BCE está jugando un papel más que criticable, al haber asumido que el rescate de los Estados es una cuestión de los mismos, y no de la autoridad monetaria", incidió.
En su opinión, el BCE debería estar dispuesto, al igual que ya hizo la Reserva Federal estadounidense, a proporcionar la liquidez necesaria y le insta a ser claro en este mensaje y no dejar pasar el tiempo. Así, recalcó que la institución debe "hacerlo ya", el jueves 2 de diciembre, "si no antes".
Por último, Citi ha retrasado su previsión sobre la fecha en la que el BCE volverá a subir los tipos hasta el primer trimestre de 2012, con lo que descarta un cambio en la política de tipos de la institución europea en 2011, al igual que para la Reserva Federal estadounidense y el Banco de Japón.