El riesgo de puentear al letrado interno

Los expertos analizan la relación entre abogados de empresa y externos.

Los socios de despachos de abogados que utilizan contactos con altos ejecutivos de las empresas para relacionarse con éstas al margen de las asesorías jurídicas internas pueden obtener un beneficio a corto plazo, pero corren un riesgo a largo. Así lo explicó ayer el abogado José Mateu Isturiz, durante una ponencia sobre las relaciones entre abogados in house y externos dentro de una jornada organizada por la Corte Española de Arbitraje y el Consejo de Cámaras de Comercio. "Es un error ver a un enemigo en el abogado interno. Además, los abogados somos gente complicada. Puentear a un abogado de empresa puede tener su coste a largo plazo, aunque a corto parezca beneficioso".

Mateu, abogado del Estado, ex vicesecretario de Repsol-YPF, ex secretario y director general de Terra-Lycos, ex secretario y consejero de Altadis y consejero de Amper, conoce muy bien los entresijos de las relaciones entre los juristas internos y los externos.

Además de insistir en el ahorro de costes que supone el papel del abogado interno respecto a la externalización, pese a que ésta tiene su función en las empresas, Mateu insistió en que actualmente "el modelo de asesoría jurídica interna duro es incuestionable por la necesidad de salvaguardar el secreto de empresa y de conseguir un know how básico".