FCC parte como favorita en el concurso del metro de Panamá tras la renuncia de Acciona
FCC es la única baza española, tras quedarse en el camino Isolux y Acciona, para hacerse con el contrato de construcción del metro de Panamá. Cuando el concurso entró en su recta final la constructora de los Entrecanales, junto a sus socias ICA, Mitsubishi y CAF, decidieron abandonar el proceso de licitación de un proyecto valorado en 1.500 millones de dólares (unos 1.200 millones de euros).
La carrera por la segunda obra cicil en importancia en el país centroamericano, tras la ampliación del Canal de Panamá, queda en un mano a mano que debe resolverse este viernes entre la citada FCC y la italiana Impregilo.
Fuentes cercanas al proceso dan como favorita a la firma que preside Baldomero Falcones. Su rival ya participa junto a Sacyr en la remodelación del Canal.
Con el fin de obra previsto para finales de 2013, la primera línea del metro atraviesa Ciudad de Panamá a lo largo de 14 kilómetros segmentados por 16 estaciones, 11 de las cuales serán subterráneas.
FCC ofrece los trenes de la gala Alstom y se presentó compartiendo consorcio, al 50%, con la brasileña Odebrecht. Una alianza que podría abrir puertas al conglomerado español en el mercado de la construcción carioca.
Impregilo, por su parte, forma equipo con Ghella y Astaldi, con material rodante de Ansaldo Breda.
La infraestructura promovida por el presidente Martinelli y la Secretaría del Metro ofrece un contrato llave en mano con el respaldo financiero del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y de la Confederación Andina de Fomento.
El diseño de los planos fue encargado a un consorcio suizo-mexicano-panameño. Y Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), operadora del metro en la Ciudad Condal, se llevó en agosto, junto a la andaluza Ayesa y la venezolana Inelectra, la gestión del proyecto.