Merkel pide que se respete la integridad y la sede alemana de Hochtief
La canciller alemana, Angela Merkel, se pronunció hoy a favor del mantenimiento de la estructura y de la sede de Essen (oeste de Alemania) de la constructora Hochtief, que pretende adquirir su competidora española ACS.
La Cancillería y el Gobierno Federal "son partidarios" de que se mantenga la integridad de la constructora alemana, indicó hoy el portavoz del Gobierno, Steffen Seibert, quien añadió que el Ejecutivo "sigue con interés" el discurrir de la operación iniciada por ACS.
Hochtief en un "estandarte" de la competencia tecnológica alemana, por lo que el Gobierno de Merkel está "interesado" en su mantenimiento, enfatizó el portavoz.
"El Gobierno alemán parte de la base de que todas las actividades empresariales se desarrollarán en consonancia con la legislación europea", añadió Seibert. El pronunciamiento del portavoz sigue a declaraciones del ministro de Economía, Rainer Brüderle, quien afirmó reiteradamente que no habrá injerencia en las operaciones, por entrar en el ámbito empresarial.
Tanto la dirección como la plantilla de Hochtief han pedido insistentemente apoyo al estamento político para evitar una absorción en contra de sus intereses. El jueves, el presidente del Partido Socialdemócrata (SPD), Sigmar Gabriel, visitó la central de Hochtief en Essen y reclamó desde ahí también la intervención del Gobierno de Merkel.
ACS ha garantizado hasta ahora que mantendrá la totalidad del grupo Hochtief en caso de que prospere la opa hostil que le ha lanzado y promete fijar este compromiso por escrito en la oferta de adquisición oficial. Una portavoz de ACS dijo esta semana al diario "Die Welt" que "no prevemos ventas, ya que ello se opondría a la lógica estratégica".