Sos se desploma un 19% en Bolsa tras anunciar la ampliación de 596 millones
Sos Corporación Alimentaria se dejó ayer en Bolsa un 18,57% de su valor tras anunciar la víspera una ampliación de capital por 596 millones con el objetivo de triplicar sus fondos propios hasta los 1.001 millones.
La compañía ha convocado junta extraordinaria para el 29 de octubre con el objetivo de ratificar la ampliación, según indicó a la CNMV. La ampliación tiene tres tramos. Los tenedores de preferentes las canjearán por nuevas acciones a un euro y con pérdida del 21%, por lo que se emitirían 237 millones de títulos. Los bancos capitalizarán préstamos por 159 millones a 0,5 euros por acción. Además, los accionistas aportarán 200 millones.
Hasta ahora, se han adherido al contrato de refinanciación las entidades titulares del 96,85% de la deuda, por lo que el contrato podría entrar en vigor, ya que el mismo recoge esta posibilidad si se alcanza el 95% y la mayoría de las entidades lo consienten.
El plan de negocio de Sos Corporación detalla el Ebitda previsto para 2011, que lo sitúa en 127,14 millones, el de 2012 (134,08 millones) y el de 2013 (142,71 millones), así como el coste de reestructuración para 2011, de 21,13 millones, el de 2012 (3,14 millones) y el de 2013 (0,01 millones). La deuda bruta del grupo quedaría en 1.050,52 millones en 2011; en 2012 bajaría hasta 1.001,91 millones y en 2013 a 921,25 millones.
La auditora Deloitte indica en su informe especial sobre el aumento de capital que, del análisis que ha realizado del plan de negocio elaborado por Sos y sus asesores y que ha servido de base para el contrato de refinanciación, se desprende la viabilidad y la capacidad de Sos en su conjunto para atender regularmente sus obligaciones financieras corrientes durante el periodo comprendido entre los años 2010 y 2016.
Asimismo, indica que los préstamos con Monte de Piedad y Caja de Ahorros de San Fernando por 2.980.927 euros no representan un compromiso directo de Sos, sino de una de sus sociedades dependientes. Ha explicado que la compañía, en conformidad con la entidad acreedora, se subrogará en las obligaciones derivadas de dichos préstamos que tendrán un vencimiento a cinco años.