Los gobiernos revisan los Objetivos del Milenio en plena crisis económica mundial
La sede de Naciones Unidas en Nueva York albergará, entre este lunes 20 y el miércoles 22 de septiembre, la Cumbre de Revisión de los Objetivos del Milenio (ODM), durante la cual se dará un repaso al compromiso asumido en 2000 por 189 países para combatir la pobreza, mejorar la educación y la igualdad de género, disminuir la mortalidad infantil y materna, combatir el VIH/sida, garantizar la sostenibilidad ambiental y crear una alianza mundial para el desarrollo.
La cumbre estará claramente marcada por la crisis financiera y la recesión económica que sufre el mundo desde 2008, que "ha causado graves reveses" en la consecución de los Objetivos, frenando o incluso revirtiendo muchos de los avances que se habían conseguido hasta la fecha, y ha afectado duramente a las economías de más de 50 países en vías de desarrollo, tal como revela el informe de 2010 del Grupo de Trabajo sobre el Desfase en el logro de los ODM.
Como no podía ser de otra forma, la crisis afectará de forma muy especial al primero de los ocho Objetivos, con el que se pretende "erradicar la pobreza extrema y el hambre" y reducir a la mitad, entre 1990 y 2015, la proporción de personas que sufren hambre y de personas cuyos ingresos son inferiores a un dólar diario.
A causa de la crisis económica, el número de pobres entre la población activa ha aumentado en 215 millones y se estima que para finales de 2010, unos 64 millones de personas se agregarán a quienes ya viven en la pobreza, según el informe del Grupo de Trabajo, elaborado por organismos como Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional (FMI), UNICEF, Programa de Naciones Unidas para al Desarrollo (PNUD), Programa Mundial de Alimentos (PAM), UNESCO, Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) y Organización Mundial de la Salud (OMS), entre otros muchos.
Por su parte, el informe de Naciones Unidas ''Podemos erradicar la pobreza 2015'' (elaborado con vistas a la cumbre y más conocido como ''Podemos'') revela que la cantidad de personas que viven actualmente por debajo del umbral internacional de la pobreza ha descendido de 1.800 millones a 1.400 millones entre 1990 y 2005 y que la proporción de personas que viven en la pobreza extrema ha pasado del 46 al 27 por ciento.
No obstante, estos datos se deben, sobre todo, al "extraordinario avance" conseguido en Asia oriental, mientras que "el progreso en la reducción de la pobreza extrema ha sido escaso en Africa subsahariana", según el informe ''Podemos''.
En cuanto al hambre, ''Podemos'' advierte de que, aunque desde los noventa se ha reducido el porcentaje de personas desnutridas, en el periodo de 2005-2007 había alrededor de 830 millones de personas desnutridas, 13 millones más que en el periodo 1990-1992. Aparte, la crisis ha aumentado en 41 millones el número de malnutridos en el mundo, según el Grupo de Trabajo.
El relator especial de la ONU sobre el derecho a la alimentación, Olivier de Schutter, declaró este viernes que "actualmente en el mundo hay cien millones de hambrientos más que hace diez años, cuando se adoptaron los Objetivos del Milenio", y denunció que los ODM han resultado un "fiasco", porque sólo han afrontado los "síntomas de la pobreza", han ignorado "las causas profundas del subdesarrollo y del hambre", como la deuda, la desigualdad comercial o los paraísos fiscales, y se han centrado en objetivos "meramente estadísticos".