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Tribuna
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Ganancias que aporta la RSC

l mayor fondo de inversión público de EE UU, el California Public Employees Retirement System, dispone de 200.000 millones de dólares (153.071 millones de euros). Su directora dice: "Esperamos que las empresas de nuestra cartera hagan lo necesario para situarse dentro de una economía sostenible. Los temas ambientales y sociales son centrales para el desempeño de las empresas en el siglo XXI". Lubber plantea: "El mundo no puede soportar más business as usual. Nuestra economía global se enfrenta a desafíos sin precedentes, como el cambio climático o la miopía de mercados financieros obsesionados por las ganancias a corto plazo".

Los gobiernos muestran también un interés en ascenso en la responsabilidad social corporativa (RSC). Así, en Noruega, el Ministerio de Finanzas termina de adoptar nuevas directrices para la inversión de su fondo soberano, uno de los más dotados del mundo, enfatizando exigentes criterios sociales y ambientales.

La demanda creciente de RSC fue el marco de referencia de la New York Declaration que suscribieron empresas líderes en la reciente reunión del Pacto Global de la ONU. Allí, se dijo que "incrustar los principios de los derechos humanos, laborales, medio ambientales y anticorrupción en las prácticas corporativas beneficia a la sociedad y las empresas. Y, a pesar de reconocer los buenos progresos, hay mucho por hacer".

Algunos de los beneficios de la RSC para las empresas son muy concretos. El New York Times plantea así que la "reputación corporativa tiene un gran valor y que las empresas necesitan proteger la suya". Estima que, al margen de otros costos, la baja en su reputación ha costado a la petrolera inglesa BP 25 billones de dólares, el 14% de su valor de mercado ajustado.

Otros beneficios son invisibles. Las empresas buscan los mejores talentos. Ellos prefieren trabajar en empresas con alta RSC. Ilustra la tendencia el sorprendente éxito de la ONG americana Enseñar por América, resaltado por Obama. Va a los campus de excelencia y ofrece a los graduados trabajar dos años como maestros en las escuelas más pobres del país. Recluta más jóvenes brillantes que cualquier otro empleador. El último año tuvo 46.359 solicitantes para 4.500 puestos, entre ellos el 18% de los egresados de Yale y Harvard. Uno de los admitidos dice que entrar es "como ser aceptado en la Ivy League".

Desde recibir inversiones, pasando por la reputación, a atraer a los más talentosos. Una RSC vigorosa no aparece como una opción sino como una necesidad.

Bernardo Kliksberg. Presidente de la Red Iberoamericana de Universidades por la Responsabilidad Social Corporativa y autor, con el Nobel Amartya Sen, de 'Primero la gente'

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