La red familiar se reactiva
La red familiar de protección, ¿es una realidad propia de los países de la cultura mediterránea o una necesidad económica? EE UU puede dar una respuesta. Se trata de un país rodeado por los océanos Atlántico y Pacífico que no tiene esta tradición, pero en esta crisis la red se está activando porque los más jóvenes están viéndose forzados a pedir la protección de sus mayores.
En su estudio anual Cómo paga América por su universidad, la financiera de préstamos a estudiantes Sallie Mae explica que este año un 43% de los estudiantes ha cancelado sus planes de trasladarse a vivir a colegios mayores y se van a quedar en la casa de sus padres. Es un porcentaje muy elevado, pero que responde a un fuerte ajuste del cinturón en una época de austeridad forzada y de subidas en las matrículas.
La cuestión es que ya no sólo son los progenitores los que tienen abierto el nido durante más años, sino que esta es una tarea que asumen cada vez con mayor frecuencia los abuelos. De hecho, y según los analistas del Pew Research, uno de cada diez niños de EE UU, vive con, al menos, un abuelo, y cuatro de cada diez (2,9 millones) están siendo criados por éstos.
Las estadísticas de esta organización dedicada al análisis social muestran que esta tendencia se ha ido incrementando poco a poco en la década que comenzó en 2000, cuando los salarios se estancaron y el crédito fácil permitió creer en la ilusión de una mayor riqueza a las rentas medias y bajas. Entre 2007 y 2008, años en los que se desató la Gran Recesión, el precio de la vivienda empezó a caer y la ilusión comenzó a evaporarse, las cifras se han disparado y un 6% más de niños pasaron bajo el ala protectora de sus abuelos.
Aunque esta situación es más frecuente entre las familias de raza negra e hispanos, el mayor crecimiento en las estadísticas es responsabilidad de las familias blancas. En el periodo en el que se entró en la actual crisis, un 9% más de abuelos de raza blanca se han convertido en los responsables de los cuidados de la generación más joven de su familia.
En algunas ocasiones, en el 8% de los casos, los abuelos también se tienen que hacer responsables de los padres de sus nietos, pese a que buena parte de ellos tengan unos recursos financieros muy limitados. Un estudio anterior de esta misma organización apuntaba a que el número de personas de distintas generaciones viviendo bajo el mismo techo está en sus niveles más altos de los últimos 50 años.
Si bien parte de estas tendencias se deben a que muchas familias de soldados desplazados en las guerras de Irak y Afganistán se han reunido bajo una misma casa o se está intentando reducir la necesidad de acoger a niños solos en instituciones ad hoc, el paro y los constantes embargos de casas han obligado a muchas familias a llamar a las puertas de sus mayores.
La activación de la red familiar no es del todo nueva. StoryCorps, un proyecto de recopilación de la memoria social e histórica del país a través de entrevistas hechas entre familiares o amigos, emitió en su programación en la Radio Pública durante 2009 muchas de las grabaciones realizadas a los abuelos más mayores. Todos ellos eran niños en la Gran Depresión que recordaban el viaje a la casa de los abuelos y los tíos y primos con los que se criaron durante años.