_
_
_
_
Estados Unidos

Obama afirma que el crecimiento es la mejor forma de reducir el déficit

Insiste al Congreso para que dé salida a nuevos estímulos

En un ambiente preelectoral muy difícil para las aspiraciones demócratas de mantener la mayoría en el Congreso, lo que complica la agenda de la Casa Blanca, Barack Obama pronunció ayer su discurso más político de cuántos ha realizado desde que llegó a la presidencia en enero de 2009. En la misma ciudad, Cleveland, en la que el líder republicano John Boehner le acusó en agosto de poner en marcha medidas inútiles, el presidente volvió a insistir en la necesidad de que el Congreso apruebe varias iniciativas de estímulo a la economía hechas públicas esta semana. Consciente de lo impopular que es profundizar en el déficit, Obama dijo que el crecimiento económico "es la mejor estrategia para rebajar el déficit y necesitamos estas inversiones para crecer".

El presidente reconoció que salir de la crisis está siendo "dolorosamente lento" y sus nuevos planes pasan por poner en marcha un plan de infraestructuras, unas rebajas fiscales durante dos años a las compras de bienes de capital para las empresas y la eliminación de la carga fiscal a las inversiones de I+D que creen empleo en EE UU.

La cuenta de todas estas ayudas suma 350.000 millones de dólares, unos 275.000 millones de euros, aunque su impacto en las cuentas públicas será significativamente menor porque ha dado mandato de cerrar agujeros fiscales que pueden compensar los costes de estas medidas.

La posibilidad de que estas medidas obtengan la necesaria autorización del legislativo es prácticamente nula, ya que la minoría republicana controla la última palabra del Senado y lo último que se aprobó durante el verano fue una transferencia de 26.000 millones de dólares a las deficitarias arcas de los estados. Otra iniciativa anterior de 30.000 millones de dólares para reducir los impuestos a la contratación en las pymes y que no tendrá impacto en el déficit lleva meses atascada en el Congreso.

Obama defendió su agenda sin dejar de atacar al partido conservador al que acusó de no tener programa y querer usar las mismas estrategias que convirtieron el superávit de Bill Clinton en el déficit de George Bush.

Millones para ayudar a las rentas altas

Uno de los asuntos que va a dominar la breve agenda del Congreso antes de las elecciones es el mantenimiento o no de los recortes fiscales temporales puestos en marcha por George Bush en 2001 y 2003. Los republicanos abogan por mantenerlos y Peter Orszag, ex director de la Oficina Presupuestaria de Obama, ha animado al presidente a dejarlos vigentes por dos años por pragmatismo político. Pero ayer Obama desestimó la idea de plano y dijo que sólo los mantendría para quien ingresara menos de 250.000 dólares al año."Con todas las presiones presupuestarais que hay y lo que hablan los republicanos de reducir el déficit, aún quieren que nos endeudemos en 700.000 millones más en diez años para otorgar una rebaja fiscal de 100.000 dólares a quienes ya son millonarios", dijo.

Archivado En

_
_