Campa afirma que si es necesario se tomarán más medidas para recortar el déficit
El secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, afirmó que el Gobierno "tomará medidas adicionales" para lograr el objetivo de déficit en 2011 en el caso de que el comportamiento de la economía sea más negativo de lo previsto en el cuadro macroeconómico del Gobierno.
En rueda de prensa para valorar el dato del IPC de julio, Campa insistió por tanto en que el objetivo de estabilidad presupuestaria es "incondicional", y explicó que la caída del coste de financiación de la deuda española que, según dijo continuará durante el próximo año, es lo que aportará un "pequeño" margen para llevar a cabo una reasignación presupuestaria que permita recuperar algunas infraestructuras aplazadas.
En cualquier caso, aseguró que "no existe información adicional para cambiar las previsiones del PIB" del próximo año -el Ejecutivo contempla un crecimiento del 1,3%-, y señaló que la economía se mantendrá en crecimientos intertrimestrales positivos a lo largo de este año.
El IPC podría subir en los próximos meses, pero dentro de una tendencia moderada
El secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, afirmó hoy que el dato del IPC de julio (1,9%) confirma que la inflación se ha "normalizado en valores moderadamente positivos" y hace prever que siga esta tendencia en los próximos meses, sin prejuicio de que pueda experimentar "subidas marginales" a medida que el consumo se vaya recuperando.
En rueda de prensa, Campa indicó que el incremento de cuatro décimas experimentado por la tasa interanual del IPC en el mes de julio responde, por una parte, al efecto moderador sobre la evolución de los precios de la campaña estival de rebajas y, por otra, a la influencia de la subida del IVA y de los componentes más volátiles del índice, como los productos energéticos.
En el caso concreto del IVA, el secretario de Estado de Economía señaló que, aunque es difícil prever en qué momento se puede trasladar la subida de este impuesto a los precios finales, al menos se estima que su traslación no es del 100%, sino que se sitúa entre el 45% o el 60%.
Asimismo, descartó que pueda tener un efecto negativo sobre la competitividad de los productos españoles, del mismo modo que restó importancia al súbito ascenso de los precios de los cereales, puesto que sólo suponen un 2% del IPC español, con lo que su impacto en la bolsa de la compra será "prácticamente nulo", como mucho "de centésimas o de milésimas".