Industria zanja sin pacto la regulación fotovoltaica
Industria cierra la regulación de la energía solar fotovoltaica sin acuerdo con el sector. El ministerio ha remitido a la CNE un borrador de regulación que reduce a un 45% las primas que cobran por producción para las nuevas plantas fotovoltaicas de suelo, unas propuestas que no contaban con el visto bueno de la industria.
El Gobierno ha acelerado su intención de regular la industria solar fotovoltaica. Y con ello ha creado malestar en el seno de las empresas. Industria ha remitido a la Comisión Nacional de Energía (CNE) varios proyectos, para fijar, entre otras cuestiones, las retribuciones de las plantas, una serie de propuestas de reales decretos y una orden ministerial. Estos dos textos se suman al ya aprobado por el Consejo de Ministros para perseguir el fraude fotovoltaico en la adscripción a las primas del Real Decreto 661/2007. La propuesta de Industria a la CNE, sin embargo, se ha producido sin cerrar un pacto con el sector, después de varios meses de negociaciones, según denunció ayer la Asociación de la Industria Fotovoltaica.
El proyecto del departamento gubernamental conocido ayer pasa por reducir la tarifa regulada a las instalaciones fotovoltaicas futuras en el 45% para las plantas de suelo; el 25% para las de techo de mayor dimensión y del 5% para pequeñas instalaciones de techos. "Dichos porcentajes recogen las mejoras tecnológicas y reducción de costes que se han producido en el sector fotovoltaico, lo que aconseja trasladar esta ganancia a los consumidores permitiendo una rentabilidad atractiva para los promotores", indicaron fuentes de Industria a Efe.
Uno de los aspectos más espinosos era el tratamiento que iban a recibir las instalaciones ya en funcionamiento -las recogidas en el Real Decreto 661/2007- y la posible aplicación de la retroactividad. En este sentido, Industria ha decidido no modificar las primas que reciben. A cambio, establece un límite de 25 años para el cobro.
No recuperación
Otra de las principales novedades propuesta es la no recuperación para convocatorias futuras de los cupos de potencia de instalaciones fotovoltaicas no ejecutadas, al contrario de lo que sucedía hasta ahora. Con esta decisión, Industria persigue reducir el volumen del mercado fotovoltaico, según el sector. Además, se excluirá en el tipo I de las instalaciones sobre estructuras de invernaderos.
La propuesta también establece un control administrativo sobre los cambios de titularidad durante la fase de promoción y construcción, e incluso hasta 24 meses tras la puesta en marcha, siempre que la transacción suponga un cambio en el control de la sociedad titular. "Esta medida reducirá las especulación en el sector, garantizando mayor dinamismo industrial y la no concurrencia a los registros de promotores sin la suficiente capacidad técnica y económica", afirmaron desde Industria.
Además de este proyecto de real decreto para la fotovoltaica, Industria ha remitido a la CNE otro que pretende regular la conexión a red de las instalaciones de pequeña potencia y otro para fijar la actividad de gestor de cargas del sistema. En el primero busca fomentar y desarrollar la generación distribuida mediante la simplificación administrativa y de conexión para las instalaciones de potencia menor de 100kW.
Impulso a la eficiencia
El segundo, pretende impulsar el vehículo eléctrico y la eficiencia del sistema energético. Para ello, se propone un peaje y una tarifa supervalle, como se denomina a las horas con menor consumo, para consumidores de baja tensión con potencia contratada hasta 15 kW, que incorpora un nuevo período de precio reducido entre las 00.00 horas y las 06.00 horas, para "incentivar el consumo de electricidad en las horas nocturnas".
"Sorpresa e indignación" en las patronales
El anuncio ayer sobre la propuesta del Ministerio de Industria para establecer el nuevo sistema de primas para la energía fotovoltaica y para regular la conexión de instalaciones ha motivado la virulenta reacción de la Asociación de la Industria Fotovoltaica (Asif).Fuentes de la organización mostraron ayer su "sorpresa e indignación" por el anuncio llevado a cabo por el departamento que dirige Miguel Sebastián y aseguraron que el proceso negociador ha sido una "tomadura de pelo, a la vista de los resultados". La patronal explicó su descontento por el hecho de que haya aspectos incluidos en los reales decretos que no se habían cerrado en la negociación con Industria y para los que no había pacto. Las empresas, por ejemplo, se había mostrado en contra de la reducción del 45% en las primas para las nuevas instalaciones.Un portavoz del sector explicó que Industria les hizo llegar el contenido de la propuesta durante la mañana del viernes, el último día de julio, lo que les ha dejado sin capacidad para estudiar su contenido y para poder articular su reacción.El presidente de la Asociación Empresarial Fotovoltaica (AEF), Juan Laso, aseguró ayer por su parte que el Ministerio ha decidido "unilateralmente" proseguir con la regulación del sector. "Y lo ha hecho sin nuestro consenso y sin nuestra valoración", manifestó.El directivo declaró que "hay aspectos en los que han trabajado conjuntamente". Sin embargo, afirmó que las propuestas incluyen medidas retroactivas que se han introducido "de forma unilateral" y que constituyen una "clara discriminación", dado que se aplica únicamente a la solar fotovoltaica. AEF informó que durante la negociación se habían barajado medidas parecidas, para las que "aún no había acuerdo". La conclusión, "se mantienen las incertidumbres sobre las inversiones".