Europa y China buscan un nuevo equilibrio comercial
La apertura de los "Días del Comercio" en el Pabellón de la UE en la Expo de Shanghai ha reunido al comisario europeo de Comercio y al viceministro de Comercio de China. El foro, donde participan líderes académicos, de negocios e institucionales de China y Europa, repasa la situación del comercio entre China y Europa.
El comisario europeo de Comercio, Karel De Gucht, ha abierto con el viceministro de Comercio de China los "Días del Comercio en la Expo de Shanghai: China como motor del comercio". El evento, que reúne a un buen número de líderes empresariales y del sector público, promueve la "voz única europea" en asuntos comerciales.
Europa, que cuenta con un mercado único, fronteras compartidas, y políticas comerciales alineadas debería tender a una voz única en asuntos comerciales fuera de sus fronteras. Para De Gucht, el crecimiento a largo plazo puede darse sólo en presencia de mercados abiertos. La crisis actual ha mostrado, nuevamente, la integración e interdependencia global, así como sus riesgos.
Para lograr un crecimiento más sostenible, deben evitarse desequilibrios importantes. Las inversiones cruzadas entre China y Europa son demasiado escasas. Tan sólo entre el 2 y el 3% de las inversiones europeas en el extranjero se destinan a China. Para ello, Europa y China están trabajando en resolver esta situación y se ha encargado a un grupo de expertos sus recomendaciones sobre esta cuestión.
A Europa le preocupa también la política de "innovación indígena" que se impone en ocasiones en los procedimientos de compra de sectores clave como las tecnologías de la información o las tecnologías verdes. Según el comisario europeo de Comercio, dicha política debería retirarse, y el diálogo es la forma de avanzar en esta materia.
Otra de las cuestiones claves en la agenda europea es la defensa de la propiedad intelectual, que De Gucht ha señalado como fundamental para lograra innovación y asociaciones sostenibles China-Europa.
La intervención de Gao Hucheng ha hecho hincapié en la complementariedad de China y Europa, donde lo esencial no va a cambiar a corto plazo. Concretamente, ha señalado, China seguirá ofreciendo capacidad para desarrollar industrias intensivas en trabajo, y necesitará conocimiento, innovación e investigación procedente de Europa.
Ante el aumento del volumen de relaciones entre China y Europa, es lógico que haya un mayor número de divergencias y problemas. Según Hucheng, lo importante es tener mecanismos de solución entre los gobiernos y las empresas.
Por último, se ha referido a la crisis de la deuda soberana, donde China ha realizado importantes adquisiciones de deuda pública europea reiterando su confianza en que Europa superará dicha crisis.