"Las empresas deben tener más voz en las universidades"
La académica exige una mayor profesionalización de la universidad, más voz en la misma para las empresas y endurecer el acceso a la enseñanza superior para potenciar la FP
Hacer I+D no está al alcance de todo el mundo". Con esta frase, Paloma Sánchez, catedrática de Economía Aplicada de laUAM. incide en la necesidad de crear incentivos para enganchar a las pequeñas y medianas empresas (el 90% del tejido industrial) y que innoven como una vía para ser más competitivas. Para ello también propugna una profunda reforma educativa y un cambio en las relaciones entre la universidad y las empresas. "La universidad debe hacerse más profesional y las empresas deben tener más voz en las decisiones que les afecten", señala.
PREGUNTA. ¿Cómo cree que se podría corregir la descoordinación existente entre las distintas políticas de innovación?
RESPUESTA. Para que una orquesta funcione todos los músicos tienen que conocer la partitura, saber tocar un instrumento y tener un director de orquesta. Los tres grandes actores en el sistema de innovación son universidad, empresas y administraciones públicas. Lo que ocurre es que hay muchas veces que las políticas no están lo suficientemente coordinadas entre los tres niveles de administración (local, autonómico y estatal) y adolecen de falta de continuidad. No se puede aprobar un programa y un año y medio después cambiarlo, porque eso desconcierta. Otro de los grandes problemas en el sistema de innovación es que hay muchas pymes que no conocen los apoyos con los que cuentan. Por ello sería necesario campañas de difusión permanentes, en plan gota malaya, lanzando el mensaje de que hay que invertir dinero porque es rentable.
P. ¿Cuál es el principal reto al que se enfrenta el sistema universitario? ¿Es necesario que adecue a las reglas del mercado?
R. Es imprescindible un cambio en la forma de gobierno de las universidades españolas, que funcionan a través de un sistema colegiado. Las personas que la dirigen van a estar en sus cargos un tiempo limitado y van a tener difícil tomar una decisión contraria frente a ciertos estamentos. A lo mejor ha llegado el momento de plantearse cerrar departamentos en la universidad. En mi opinión se tienen que cumplir uno de los dos criterios para que se mantenga el empleo y la actividad en la universidad: el criterio de la excelencia y el de mercado. Para el primero siempre debe haber fondos públicos, aunque no haya mercado, si tiene una consideración de excelencia. Para el segundo es necesario captar demanda y buscar nuevos nichos de mercado. Pero si no se da uno de los dos hay que ir tomando medidas: si ni somos buenos y no hay demanda, hay que amortizar los puestos. Ahora es un buen momento para ponerlo en marcha, ya que en los próximos años va a haber un proceso masivo de jubilación.
P. ¿Considera necesario que las empresas tengan una mayor representatividad en los órganos de gobierno de las universidades?
R. Las empresas deben tener más voz en la gestión de la universidad. En los sistemas universitarios más profesionalizados, como los anglosajones, los profesionales tienen una mayor capacidad para decidir que centros abrir, cuáles cerrar, cuáles mantener. También debería escuchárseles más a la hora de fijar los planes de investigación o los contenidos de las enseñanzas.
P.Uno de los grandes problemas que revela es estudio en materia educativa es el fuerte abandono escolar tras la Secundaria, ¿por qué existe esa diferencia respecto a la Unión Europea?
R. Creo que el número de estudiantes que no continúa su formación tras acabar Secundaria es, sin duda, uno de los peores indicadores en los que sale representado España frente a otros países de la UE. Mientras que la media de la Unión Europea no llega al 17%, en España esa cifra se eleva al 32%. El principal problema es que no se han prestigiado otras alternativas a la universidad, como la FP.
P. ¿Qué medidas propone para fomentar la llegada de más alumnos a la FP?
R. Creo que se ha hecho llegar desde hace muchos años el mensaje de que lo bueno es ser universitario. Si se endurecieran los criterios para entrar y mantenerse en la universidad, creo que se produciría un traslado de alumnos desde el ámbito universitario hacia la formación profesional. Gran parte de ese proceso se estimularía si se promoviera la autonomía financiera de las universidades. Hay que cobrar más de lo que se cobra ahora y acompañarlo de una política de becas adecuada, para que los que merezcan entrar en las universidades y no tengan medios lo puedan hacer. El sistema también debe hacer muy costoso el repetir: quien se matricule de una asignatura por segunda o tercera vez le tiene que salir muchísimo más caro, y eso se puede hacer ya. De hecho, el ministro de Educación ya lo está sopesando.
"Hay que prestigiar la imagen del profesor"
"Los cambios en materia educativa necesitan un Pacto de Estado". En un primer análisis, Sánchez identifica dos problemas cruciales que hay que resolver en el sistema educativo, especialmente en los niveles de primaria y secundaria. "No existe una cultura del esfuerzo entre los alumnos y se ha producido un deterioro progresivo del valor del profesor.El cambio de estas dos cosas va a llevar tiempo y requiere de un Pacto de Estado para que se logre. Esto no puede estar al vaivén de los cambios políticos", recalca.Por ello resalta la necesidad de prestigiar la carrera del profesor y alaba las decisiones tomadas por algunas comunidades, como Madrid, de considerar por ley "autoridad pública" a los 75.000 profesores de colegios públicos y concertados. "La medida adoptada por Madrid puede ser algo intervencionista, pero hacen falta muchas campañas de este estilo desde el sector público para revertir ese estado de cosas.Ese intervencionismo es positivo", remarca Sánchez, quién recuerda los incidentes en algunos centros de esa comunidad con episodios de violencia hacia los profesores. Y como modelo a seguir para cambiar la actual situación que se vive en la educación primaria y secundaria pone como ejemplo los logros conseguidos en Finlandia, en el que la carrera de Magisterio tiene una gran consideración desde el punto de vista económico y social. "En Finlandia hay incentivos para que los mejores alumnos de secundaria tengan becas del estado para que puedan cursar estudios de magisterio, con el fin de que puedan seguir desarrollando su vocación", señala.C.M.