La huelga en Metro de Madrid se mantiene, pero con servicios mínimos
Los empleados de Metro de Madrid decidieron ayer continuar con la huelga, aunque optaron por restablecer los servicios mínimos, que funcionarán hoy y mañana. La apertura de 400 expedientes informativos por parte de la Comunidad de Madrid les obligó a rebajar el tono de la protesta. El fin de semana no habrá paro y el lunes volverán a reunirse para decidir si reanudan las protestas.
El caos que vivió Madrid el martes, en el que se produjo la primera jornada de huelga sin servicios mínimos, se volvió a repetir a primera hora de ayer. Los piquetes se encargaron de que ningún metro saliera de las cocheras y el servicio quedó suspendido durante todo el día, aunque la previsión de los ciudadanos y el refuerzo de autobuses mitigó en parte el impacto de la huelga. Sin embargo, dos accidentes en carreteras de entrada a Madrid, en las que se vieron implicados camiones, provocaron atascos kilométricos y que la hora punta se alargase más de lo habitual.
Todo hacía presagiar que la jornada de paro transcurriría igual que la del lunes, pero todo cambio cuando el Gobierno regional hizo público a primera hora de la mañana, tan sólo minutos antes de la reunión prevista por los empleados de Metro de Madrid, que había abierto expedientes informativos a 200 trabajadores por incumplir los servicios mínimos. En una entrevista en Onda Cero, el consejero de Presidencia, Francisco Granados, aseguró que más de 400 conductores recibirían en su domicilio la notificación. "El Gobierno regional ha tenido especial celo para hacérsela llegar a estos señores, a los que no les va a salir gratis lo que han hecho". Pocos minutos después, los trabajadores de Metro de Madrid, representados por CC OO, UGT, Sindicato de Conductores, Solidaridad Obrera y Sindicato Libre, optaron por continuar con la huelga, pero respetando los servicios mínimos. "Este gesto hacia el pueblo de Madrid acabará en el momento en el que haya un sólo trabajador expedientado", advirtió un miembro del Comité de Huelga, quién aseguró que era necesario medir las fuerzas de cara a una posible reanudación de los paros. "Un conflicto que se enquista no va a acabar bien y es necesario dosificar las fuerzas", señaló.
Cuatro heridos por piquetes
La calma con la que transcurrió la jornada se vio alterada por la agresión a cuatro trabajadores del metro cuando intentaron acceder a su puesto de trabajo. Según informaron fuentes de la compañía pública, los empleados fueron agredidos en las cocheras del distrito de Canillejas y tuvieron que ser atendidos por diversas contusiones.
El ambiente también se vio enrarecido por el cruce de declaraciones entre la vicepresidenta primera del Ejecutivo, María Teresa Fernández de la Vega, y la presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre. La primera exigió a la segunda que se sentara con los convocantes de la huelga para buscar una solución al conflicto. La respuesta la obtuvo del portavoz del PP en la Asamblea de Madrid, David Pérez, quién acusó a De la Vega de insultar a los madrileños. "Se ha erigido en piquete de la huelga salvaje", señaló.
Tres millones de pérdidas al día
Metro de Madrid hizo ayer una primera valoración de las pérdidas registradas por la huelga sin servicios mínimos. La empresa calcula que deja de ingresar cada día de huelga un total de 3,2 millones de euros, según informaron fuentes de la compañía a Europa Press. Una cifra que triplica al dinero que quería obtener la Comunidad de Madrid con el recorte de salarios a los funcionarios y a los empleados de las empresas públicas (1,1 millones al día).La Federación de Empresarios de Madrid (Fedecam) también presentó una primera valoración sobre las pérdidas registradas en las empresas. Según sus cálculos, por cada día de paro se han perdido 12 millones de horas de trabajo, lo que supone una pérdida de 108 millones en producción. El presidente de Fedecam, Alfonso Tezanos, aseguró que las pérdidas "también han repercutido a sectores como hostelería, servicios, turismo, logística o comercio".