Banca, eléctricas y los valores con más deuda provocan otro desplome bursátil
Todo el mercado cayó con fuerza, pero el desplome de algunos valores rozó el récord del año, en un ejercicio en el que el listón de las mayores caídas está ya muy alto. La banca fue el caso más claro, con BBVA y Santander dejándose el 7,2% y el 6,8%. También las eléctricas aportaron, una jornada más, pérdidas al Ibex.
Casi nadie se salvó de las fuertes caídas que arrasaron la Bolsa española, lastrada por problemas globales y por cuestiones más locales. Banca, eléctricas y las empresas con elevada deuda fueron algunos de los valores que, en la jornada de ayer, lideraron los más que sonoros descensos del parqué madrileño, una evolución que en el caso de las financieras se repitió casi en la misma medida en Europa.
Aunque la empresa que más perdió del Ibex fue Sacyr -con un descenso del 9,2%-, los que le siguieron en esa trayectoria fueron principalmente los bancos. Los dos grandes, BBVA y Santander se dejaron el 7,24% y el 6,79%, respectivamente, mientras que Bankinter y Popular se desplomaron el 8% y el 6,73%. En conjunto estas entidades, junto a Sabadell y Banesto, vieron reducido en más de 8.300 millones de euros su valor bursátil.
Si los eventuales problemas de acceso a la liquidez y su exposición a la deuda pública fueron algunos de los factores que más pesaron contra la banca española, la anunciada revisión de la regulación del sector eléctrico -que afecta casi al 25% del Ibex entre eléctricas integradas, renovables, gestores del sistema y suministradores de equipos- se percibió una jornada más. Ibedrola y Acciona sufrieron un declive del 5,68% y del 4,8%.
Como en otras sesiones, los valores con más presencia de inversores institucionales extranjeros -que generalmente son los más líquidos- no salieron bien parados. Es el caso de Telefónica, que cuenta además con la incertidumbre de su batalla con Portugal Telecom por Vivo, que perdió el 5,12%. Y, al ser una de las más grandes, su efecto en el Ibex fue demoledor.
Pero ayer lo que se palpó tanto en España como en Europa es que las dudas sobre al recuperación económica se impusieron a los sentimientos más optimistas. Esas posiciones se basaban tanto en los tibios resultados de la cumbre del G-20 como en los signos de debilidad de la economía china, por lo que el índice que agrupa en el Euro Stoxx a las empresas materias primas y siderúrgicas fue el que presentó peor comportamiento. Las mineras Río Tinto y Xstrata se dejaron el 6,3% y 6%, respectivamente, y ArcelorMittal, el 6,31%.
Esta atmósfera se reflejó, asimismo, en el crudo, el Brent cotizó en los 75 dólares el barril, y en el desmoronamiento generalizado de las commodities en Londres.
Mal día para los bancos europeos
Ni siquiera los bancos españoles fueron los peores de Europa. En el subíndice del Stoxx 600 que agrupa a los valores bancarios (-4,54%) se vieron ayer hundimientos igual de espectaculares. El del irlandés Allied Irish ascendió al 9,6% y el del italiano Intesa Sanpaolo, el 7,76%. También algunos de los bancos más fuertes de Francia -Crédit Agricole, BNP Paribas y Société Générale- sufrieron un severo correctivo. En este grupo estuvo incluido la británico Barclays. Y, aunque el castigo no es comparable, Deutsche Bank perdió el 4,18% y Commerzbank, el 2,92%.No hubo claros ganadores en un día en el que el pesimismo cundió en Europa, y que no dejó subidas para ningún valor del Euro Stoxx. Si bien las pérdidas más moderadas se centraron en las empresas de telecomunicaciones, como Deutsche Telekom y France Télécom, y las de alimentación. Danone y Unilever resistieron mejor el empuje de las ventas.