Por qué la venta de Marsans parece una liquidación
Todo lo que rodea a la operación de venta de Marsans se asemeja más a una liquidación que a un intento real de reflotar la compañía de viajes, que este año cumple un siglo de historia. A pesar de los comunicados de la nueva propietaria del grupo, la sociedad Posibilitumm, en los que ésta asegura que el interés de la empresa es el de garantizar la supervivencia de la compañía, lo cierto es que hasta ahora los pasos dados son prácticamente los mismos que daría alguien encargado de su liquidación.
æpermil;stas son las razones que sostienen la afirmación de que la operación de venta de Marsans es una liquidación encubierta:
La naturaleza del comprador. Posibilitumm, la sociedad que ha adquirido Marsans por 600 millones de euros, la deuda de las empresas del grupo, pertenece a Ángel de Cabo Sanz, especializado en quiebras y liquidaciones de empresas. No es una compañía con experiencia en el sector turístico. Ninguna empresa del sector quiso hacerse cargo de Marsans. Fuentes de una compañía que a finales del pasado año negoció la adquisición del grupo aseguran que se "levantaron de la mesa" cuando accedieron a los datos actualizados de negocio de Marsans.
Ninguna empresa del sector quiso hacerse cargo de Marsans, sólo accedió a ello Posibilitumm
El mismo día que Posibilitumm anunciaba la operación de compra, comunicaba la solicitud de concurso voluntario para Viajes Marsans. Se trata del mismo procedimiento que De Cabo Sanz siguió para hacerse cargo, a finales de 2009, de Teconsa, perteneciente al grupo Martínez Núñez. A pesar de que los nuevos dueños de Teconsa, como insisten ahora en Marsans, aseguran que van a luchar por la supervivencia de la compañía, el informe concursal del grupo de construcción no deja muchas esperanzas a sus acreedores: "A la vista de la destrucción de la estructura productiva y la pérdida de capacidad de contratación pública inherente al concurso, la administración concursal considera que la compañía carece de cualquier oportunidad de viabilidad, estando abocada a la liquidación", indican los administradores concursales de Teconsa nombrados por el juez. En el caso de Marsans habrá que esperar a la elaboración del informe concursal para conocer la situación real del grupo en la actualidad y la responsabilidad que en el concurso de la compañía ha tenido la administración anterior, Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual.
La situación de Viajes Marsans y Teinver. A falta de datos actualizados de negocio de las empresas adquiridas por Posibilitumm, son las cuentas presentadas al Registro Mercantil correspondientes al año 2008 las últimas que pueden servir para hacerse una idea de la situación financiera de las compañías. PricewaterhouseCoopers, auditor del ejercicio 2008 de Teinver, que controla el capital de la cadena hotelera Hotetur, la aerolínea Air Comet y la filial de handling, entre otros activos, advirtió en su informe que no podía emitir una opinión sobre las últimas cuentas dadas las incertidumbres sobre su viabilidad. En ese ejercicio, Teinver registró un fondo de maniobra negativo de 256,5 millones de euros. La situación de Viajes Marsans, que ha presentado concurso voluntario y afronta demandas de concurso necesario, no es mejor.
Condiciones impuestas a la viabilidad de Viajes Marsans. El viernes, directivos de Posibilitumm se reunieron con representantes de los trabajadores de Viajes Marsans. En esa reunión no se puso sobre la mesa ninguna cifra de despidos. Sin embargo, a media tarde, la sociedad dueña de Marsans emitió un comunicado en el que cifraba hasta 1.479 los despidos (aproximadamente el 70% de la plantilla de la empresa). La maniobra tuvo como consecuencia una respuesta airada desde UGT, sindicato que comunicó su total desconfianza hacia los nuevos dueños de la empresa.
Más allá del error estratégico que supone subestimar el peso de los sindicatos en cualquier negociación empresarial, las condiciones que Posibilitumm enumeró en su comunicado del viernes para asegurar la viabilidad de Viajes Marsans son difícilmente alcanzables. Además de la reducción de plantilla, la empresa tendría que lograr el permiso de IATA para vender billetes y llegar a acuerdos con agencias de viajes para trabajar con ellos. Pero la desconfianza que genera ahora la marcaMarsans a la hora de planificar unas vacaciones complican esa condición. Además Posibilitumm afirma que es necesario vender activos no estratégicos para lograr algo de liquidez. Pero esa era una decisión que podría haber tenido mejores frutos antes de que Viajes Marsans pidiera concurso.
Necesariamente, concurso necesario. Por último, la incapacidad de Posibilitumm para lograr que empresas acreedoras retiren sus solicitudes de concurso contra Viajes Marsans muestra también las pocas esperanzas reales que tenía Posibilitumm de reflotar la empresa. Antes de que la sociedad solicitara concurso voluntario para Viajes Marsans, varias compañías habían instado ya la medida. Si Posibilitumm ni siquiera dispone de liquidez para que estas empresas retiren sus demandas, cerca de cinco millones de euros, según fuentes conocedores del proceso, ¿qué pretendían al solicitar concurso voluntario?
Al no pagar a esas empresas acreedoras, previsiblemente el concurso de Viajes Marsans será declarado como necesario. Lo que supone un indicio de la culpabilidad del concurso de acreedores, ante la que tendrían que responder Díaz Ferrán y Pascual.