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Hasta 1.000 trabajadores

El plan de viabilidad de Marsans podría afectar al 50% de la plantilla

El anunciado plan de viabilidad para Viajes Marsans que preparan los nuevos dueños, con el empresario Ángel de Cabo a la cabeza, podría incluir un ERE "importante" que afectaría a unos 1.000 trabajadores, algo más del 50% de la plantilla, según informaron fuentes sindicales.

Sede de Marsans
Sede de MarsansPablo Monge

Posibilitum podría anunciar el próximo jueves al comité de empresa el anunciado plan de reestructuración que está actualmente elaborado, y cuyo alcance, oficialmente, no conocen todavía los representantes de los trabajadores.

No obstante, las mismas fuentes indicaron que este porcentaje es estimativo teniendo en cuenta las oficinas que "no son rentables" y los cálculos que vienen manejando los sindicatos, que confiaron, no alcancen los 1.500 trabajadores.

"Ojalá no sea cierto, pero creemos que rondará los 1.000 empleos", indicaron, para añadir que no descartan emprender movilizaciones este mes, si el plan no satisface a los trabajadores, que propondrán, de nuevo, el cierre de oficinas los sábados, ante la caída del flujo de turistas y actividad en los puntos de venta desde que empezaron los problemas de Marsans.

El "gran grueso" de las oficinas de Viajes Marsans se encuentra en Madrid, donde se concentra el 70% de la plantilla, si bien también hay un alto porcentaje de oficinas "no rentables" en Cataluña. De las 1.000 oficinas que contaba en su red, excluyendo las 200 asociadas que han migrado a Viajes Orizonia en su mayoría, actualmente el número de oficinas ronda las 600 ó 700, si se incluyen las de Viajes Crisol.

Los sindicatos tomaron la palabra a la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, quién aseguró el pasado viernes que el Ejecutivo "vigila" y sigue con "la máxima atención" la situación de los trabajadores en empresas con dificultades como es Marsans. En esta línea, pidieron al Ejecutivo que "controle de cerca" la gestión de los nuevos gestores.

Retoman la negociación con la IATA

Los trabajadores exigirán al nuevo dueño, Ángel de Cabo, y al director general, Iván Losada, una "muestra de voluntad y permanencia" en la compañía, con "dinero sobre la mesa", que permita reflotarla y solucionar el contencioso que la agencia de viajes tiene con la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA), que le impide vender billetes de avión.

"Si se solucionase este tema sería una muestra de que quieren que las oficinas recuperen su actividad", valoraron las mismas fuentes, que destacaron la incertidumbre en la que viven los cerca de 2.000 trabajadores que permanecen en la empresa, a la espera de que la juez admita o no la solicitud de concurso voluntaria presentada por Marsans.

Trabajadores de las oficinas de viajes recordaron que el acuerdo que alcanzaron los empresarios Gerardo Díaz Ferrán y su socio Gonzalo Pascual, hasta la semana pasada dueños de Marsans, con las principales aerolíneas era puntual y permitía la venta de billetes a través del código de una de sus empresas, siempre que el pago se realizase con tarjeta, algo que ya "ni se hacía".

Los nuevos dueños de Marsans se han puesto ya en contacto con la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA), para tratar de solucionar el tema del aval, según confirmaron fuentes del grupo.

El pasado 21 de abril, la IATA decidió retirar a Viajes Marsans la licencia para la venta de billetes de avión, exigiéndole un aval de 20 millones de euros para recuperarlo. Marsans no pudo hacer frente al pago del BSP -banco que paga por adelantado los billetes de avión- de la IATA, acumulando además una deuda de cinco millones de euros.

Al parecer, la intención de la compañía es negociar otras fórmulas que le permitan reactivar la venta de billetes de avión, fijando una cantidad de pago inmediato, por ejemplo. Fuentes de la IATA señalaron a Europa Press tras la compra del grupo por parte de Posibilitum, que la situación "no había cambiado".

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