Barnier insiste en que cada país de la UE cree un FROB preventivo
Bruselas descarta crear un fondo comunitario para la resolución de futuras crisis bancarias, pero cree que cada país debe crear un fondo nacional, según el plan de trabajo que tiene previsto aprobar hoy la CE.
El plan, elaborado por el comisario europeo de Mercado Interior, Michael Barnier, señala como objetivo político la creación de fondos nacionales de rescate para el sector financiero, alimentados por una contribución previa de las entidades de cada país.
Los nuevos fondos, similares al FROB creado en España para la coyuntura actual, evitarían, según la CE, que la factura de futuras crisis vuelva a recaer en el contribuyente.
La propuesta ya fue adelantada por Barnier durante la reunión de ministros de Economía y Finanzas de la UE (Ecofin) celebrada en Madrid hace sólo seis semanas.
La idea fue prácticamente rechazada durante ese encuentro por temor al impacto de una nueva tasa en un sector debilitado por la crisis y que afrontará nuevos requisitos de capital el contexto de Basilea.
Pero Barnier ha decidido seguir adelante con su plan, aunque el documento que aprobará hoy la CE reconoce numerosas dudas sobre su concreción y fija 2011 como plazo inicial para presentar cualquier proyecto legislativo.
La CE aún no sabe el alcance ni la envergadura de los fondos de resolución de crisis que, a su juicio deberían crearse en cada país de la UE. Tampoco ha resuelto aún en base a qué se calcularía la contribución de cada entidad (parece descartar los activos y apostar por el pasivo como base de cálculo, corregida, tal vez, en función de los beneficios y los bonos devengados).
"La Comisión está analizando con mucho cuidado cual de las diferentes bases de cálculo sería la más apropiada para financiar el fondo", señala el documento de Barnier, titulado "Comunicación sobre fondos de resolución bancaria".
Fondo común
En el informe, la CE se declara convencida de que la comunitarización de los recursos en un solo fondo, como ya propuso en octubre del año pasado, sería una solución mucho más eficiente. Pero se da por vencida y reconoce que "sería muy difícil (...) dada la ausencia de un marco integrado a nivel de la UE de supervisión y de gestión de crisis".
Así que, de momento, la CE apuesta por fondos nacionales, financiados con contribuciones por adelantado de las entidades bancarias (quedan excluidas, por tanto, las aseguradoras y los fondos de inversión) y que los recursos obtenidos se podrían invertir en valores no bancarios, muy líquidos, con poco riesgo y beneficiosos "para la economía real".
El resto de cuestiones quedan pendientes par otra Comunicación en octubre.
Fondos al margen del presupuesto
Los fondos nacionales de rescate alcanzarán, según la CE, un volumen considerable, cualquiera que sea el método de cálculo para su financiación, lo que puede incitar a algún Gobierno a utilizar sus recursos para otros fines presupuestarios. Por ese motivo, el comisario europeo de Mercado Interior, Michel Barnier, propondrá hoy que los fondos "permanezcan separados de los presupuestos nacionales y se dediquen sólo a los costes de resolución" de crisis bancarias. Barnier propone que su gestión la realicen las autoridades encargadas en cada país de resolver esas crisis. En el caso español, el Banco de España.