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La apuesta por Brasil

Felipe González pide al país más gasto en educación

"Latinomérica es la que mejor ha soportado la crisis financiera"

"América Latina, que podía haber ofrecido tres o cuatro master en crisis financieras, es la que mejor ha soportado la actual crisis". Con esta frase, el ex presidente del Gobierno español y actual presidente del Comité de Sabios de la UE, Felipe González, quiso subrayar que el periodo recesivo que se inició en 2007 con la caída de Lehman Brothers ha impactado más en aquellos países, como EE UU o las grandes naciones de la Unión Europea, que lo generaron con sus desequilibrios. "Ahora están obligados a emprender reformas estructurales. Si no se corrigen los factores que nos llevaron a la crisis financiera, estarán creando el germen de la siguiente", dijo en el foro sobre la economía de Brasil, organizado por El País.

En el lado contrario, según González, se sitúan la mayoría de los países latinoamericanos, en especial Brasil, al que calificó como una potencia a nivel mundial. "Se ha convertido en un país predecible y este es, sin duda, un primer factor de desarrollo, que le ha llevado a crecer a tasas inimaginables hace algunos años". Además aseguró que ha ganado en eficiencia y eficacia en la gestión de la administración y ha logrado una buena cooperación entre el ámbito público y privado, plasmada en el buen funcionamiento del sector bancario.

González pronosticó que la fuerte dependencia de Brasil respecto de las materias primas, más acuciante por la fuerte demanda procedente de China, provocará tensiones a medio plazo por la volatilidad de los precios. "Pueden producirse dientes de sierra en los precios, pero ese es un valor seguro porque siempre tendrá una demanda". dijo.

Ante la posibilidad de que surjan esas tensiones, el presidente del Comité de Sabios de la UE sugirió a Lula que priorice la inversión en educación y en formación de capital humano frente a las materias primas. "Brasil tiene una pirámide demográfica muy poco envejecida y puede romper barreras en todos los sectores de actividad", pronosticó.

Todo lo contrario de lo que puede suceder en la Unión Europea, a la que González auguró un panorama muy difícil por no haber puesto en marcha las reformas estructurales necesarias y por las dificultades que entraña una población demasiado envejecida. "Los países europeos tienen una demografía que les pesa como una losa sobre su presente y sobre su futuro. En 2050 habrá 70 millones de personas activas menos en la Unión Europea y 90 millones más de pensionistas", recalcó durante su intervención. Retomando el discurso de Lula, González resaltó que la principal conclusión de la crisis es que la configuración del mundo está cambiando. "Los actores que hasta ahora han gobernado el mundo no van a seguir siendo los mismos y eso deberá provocar cambios en el G-7, en el G-20 e incluso en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que se puede estar quedando pequeños", apuntó González, quién no obstante señaló la necesidad de que todos los países aprendan que las respuestas a los problemas deben ser globales. "Los desafíos mundiales sólo se podrán resolver desde la gobernanza global", apostilló.

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