Telefónica mete presión a Portugal Telecom para que renuncie a Vivo
Telefónica ha sacado la artillería para resolver su posición en Brasil. La española ha puesto 5.700 millones a Portugal Telecom (PT) sobre la mesa si se decide a renunciar a Vivo y venderle a Telefónica su mitad. La negativa de Portugal Telecom ha sido rotunda, pero la esperanza es que se abra una brecha con los accionistas y que la lusa acabe cediendo. Para ello, incluso se valora pagar más.
Cuándo no significa, realmente, no? La pregunta se la hace Barclays en su análisis de la oferta lanzada por Telefónica sobre el capital de PT en la operadora brasileña de móvil Vivo. Y se trata de un comentario significativo ya que, por muchas murallas chinas que se intenten imponer, Barclays no deja de ser uno de los grandes accionistas de la operadora lusa, con un 5% del capital. Por eso, las palabras del banco son valiosas para Telefónica por una doble vía: pueden anticipar una lucha de los accionistas contra los gestores y dejan claro que hay otros que, como ella, piensan que esto no ha hecho más que empezar.
Barclays no sólo se pregunta, también responde. Para el banco, el partido no terminará hasta el 6 de junio, fecha teórica de finalización de la oferta, "o más, si Telefónica prolonga su propuesta".
De ahí que la operadora española no lo diera ayer todo por perdido tras el rechazo rotundo del consejo de administración de Portugal Telecom a su oferta en la noche del lunes. Así termina el primer acto del asalto a Vivo, que lleva años fraguándose, pero que comenzó formalmente el 6 de este mes, cuando Telefónica presentó su oferta para comprar su parte en la operadora brasileña.
La oferta de 5.700 millones es el 80% del valor en Bolsa de PT u ocho años de beneficios
Telefónica ofrece 5.700 millones por el 29,7% de Vivo en manos de Portugal Telecom. Si eso funciona, está dispuesta a comprar también las acciones con derecho a voto que cotizan en Bolsa. Es un 3,8% más de capital y elevaría el desembolso total a 6.300 millones.
La oferta de Telefónica es generosa. La prima es del 145% sobre la cotización de Vivo en el último mes. En términos relativos, equivale al 80% de la capitalización bursátil de la portuguesa, a ocho años de beneficios -tomando las cifras de 2009- y al Ebitda de 2,3 ejercicios.
Todo ello, en plena crisis económica mundial y con Portugal como uno de los países más vulnerables a los ataques especulativos. Y eso es precisamente lo que Telefónica quiere que piensen Portugal Telecom y sus accionistas.
El rechazo no ha gustado nada en España, donde se considera que la oferta de partida es ya de por sí suculenta y se cuestiona que PT decidiera sin consultar con los accionistas, sin una opinión de un experto financiero o sin ofrecerse a negociar, algo que también pusieron de manifiesto algunos consejeros, según fuentes conocedoras de la situación. La primera derrota es un hecho, pero ahora se mira a los accionistas de PT por su capacidad de gestar una rebelión contra el consejo y forzar una junta. Entre los grandes hay muchos bancos lusos -la pública Caixa Geral de Depósitos y Banco Espírito Santo controlan el 15%-, capaces de ser tentados por la llamada de ingresos milmillonarios.
Sin embargo, la importancia de Vivo para Portugal Telecom puede complicar la situación. Vender esta participación "significaría amputar el futuro" de la operadora, afirmó ayer su presidente, Zeinal Bava. Vivo es la única fuente de crecimiento de Portugal Telecom y supone casi la mitad de los ingresos y el 40,5% del Ebitda del grupo.
Por eso, fuentes cercanas a Telefónica no descartan que se esté pensando en subir la oferta. Por ahora, la mayoría de los analistas ha dado por bueno el precio y no ha cuestionado la alta prima. Ellos, igual que Telefónica, perciben la necesidad de la operadora de crecer en Brasil y de integrar sus negocios de móvil y banda ancha, algo imposible con PT. HSBC calcula las sinergias de esa integración en 3.300 millones, mientras que Bernstein las eleva a 4.500 millones, lo que podría justificar subir la oferta.
La Bolsa, sin embargo, no lo tiene tan claro. Portugal Telecom se disparó ayer, pero Telefónica cedió un 3,69%, ante los temores de que se embarque en una estrategia agresiva de adquisiciones.
Y es que si la oferta por Vivo no funciona, hay analistas que consideran que Telefónica no puede quedarse parada. También hay voces dentro de la compañía que así lo indican y que apuntan a una opa hostil sobre Portugal Telecom. Telecom Italia y su filial brasileña tampoco están descartadas. Las subidas de Vivo y TIM Brasil en Bolsa indican que el mercado cree que habrá lucha.
Una proposición rodeada de secreto
El consejo de administración de Telefónica aprobó una oferta de 5.700 millones y la operadora la presentó formalmente la semana pasada sin que nada trascendiera. Este movimiento sólo se conoció cuando Portugal Telecom decidió informar mediante un hecho relevante de que la propuesta había sido rechazada.¿Por qué no fue Telefónica la que anunció la oferta? En la documentación de la opa figura una cláusula, la 12, en la que Telefónica exige a PT confidencialidad sobre la oferta. Sin embargo, según fuentes conocedoras de la situación, fue la portuguesa la que pidió el secreto durante los contactos previos que se mantuvieron antes de presentar la oferta, con el objetivo de poder convocar su consejo y debatir en él la propuesta sin distracciones.