Almunia dice que la evaluación de riesgos "es exagerada"
El comisario europeo de Competencia, Joaquín Almunia, indicó ayer que la agitación que viven los mercados financieros en las últimas semanas responde "a una evaluación exagerada de los riesgos". A su juicio, esto es malo para todos los países, pero sobre todo para quienes tienen problemas, como Grecia, al que no quiso comparar con España. "Todos saben que ese caso es particular, con rasgos que ningún otro país ni de la zona euro ni de la Unión Europea tiene y los primeros que lo saben son los responsables del Gobierno griego que están haciendo un esfuerzo muy importante en el ajuste", resaltó.
La resistencia de Alemania a activar el mecanismo de ayuda a Grecia, tanto por motivos electorales (el 9 de mayo hay elecciones en el estado alemán de Renania-Westfalia) como económicos (no se creen todavía el plan de ajuste del Ejecutivo heleno), ha disparado la inestabilidad en la euro zona y ha llevado a la agencia Standard & Poor's a rebajar la nota de la deuda griega, española y portuguesa. En este escenario, la Comisión Europea, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Central Europeo anunciaron ayer que están a punto de cerrar un acuerdo con las autoridades griegas sobre el plan de ajuste de tres años que deberá aplicar el Gobierno de Atenas, a cambio de beneficiarse de un plan de rescate de 120.000 millones de euros para evitar la quiebra. Así lo avanzó ayer el comisario de Asuntos Económicos, Olli Rehn, quien dijo que las negociaciones concluirán "en pocos días". Rehn señaló que la puesta en marcha del plan de rescate "dará a Atenas suficiente respiro frente a las presiones de los mercados, para que pueda restaurar la sostenibilidad de sus finanzas públicas".
El presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, fue más allá y reclamó un plan de ayuda multianual a Grecia y exigió al Ejecutivo alemán, el que más dinero va a aportar en la operación (cerca de 6.000 millones), celeridad en la tramitación del rescate.