Bruselas exime de responsabilidad a las líneas aéreas en la crisis del volcán
La Comisión Europea admitió ayer que el caos aéreo tras la erupción del volcán islandés es una circunstancia excepcional ajena a las líneas aéreas, por lo que podrán recibir ayudas de los Gobiernos para compensar unas pérdidas que oscilan entre 1.500 y 2.500 millones de euros.
El comisario europeo de Transportes, Slim Kallas, no entonó ayer el mea culpa en nombre de las autoridades nacionales de navegación aérea por el cierre del espacio aéreo durante seis días. Pero entre el sector, el balance preliminar de Kallas sobre las pérdidas causadas por esa polémica decisión sonó incluso mejor que una disculpa.
Bruselas dejó ayer claro que el caos aéreo y sus importantes consecuencias económicas no han sido culpa de las líneas aéreas, lo cual, según la interpretación del sector, las pone a salvo de cualquier reclamación de daños y perjuicios.
El comisario anunció también una reforma de la metodología de evaluación de riesgos, que la Comisión Europea propondrá a la OACI en septiembre de este año.
Y Kallas reiteró la disposición de la Comisión a aprobar las ayudas públicas que cada capital decida conceder a sus aerolíneas o aeropuertos para compensar las pérdidas sufridas entre el 15 y el 22 de abril. El comisario, con datos que calificó de "muy, muy preliminares", cifró esas pérdidas "entre 1.500 y 2.500 millones de euros".
"La Comisión considera que las circunstancia excepcionales de los últimos días justifican medidas de apoyo para compensar las pérdidas sufridas", animó Kallas a los Gobiernos. El comisario sólo pide que no se aproveche la ocasión para socorrer a compañías que atraviesen dificultades ajenas a la crisis del volcán.
Pero Bruselas recomienda, además, otras medidas para aliviar la difícil situación en que han quedado las aerolíneas. La Comisión recomienda a las autoridades nacionales y a Eurocontrol que aplacen durante u un cierto periodo de tiempo el cobro de las tasas de navegación, para evitar que las compañías sufran problemas de liquidez o cash flow.
Las normas sobre los slots o turnos de vuelo en los aeropuertos también deben flexibilizarse, a juicio de la Comisión, para evitar que las líneas puedan perder alguno de sus derechos como consecuencia de las operaciones no efectuadas desde el día 15 de abril.
La Asociación de Aerolíneas Europeas (AEA, según sus siglas en inglés) mostró su satisfacción por las propuestas de Kallas, en cuya elaboración han participado también el comisario de Competencia, Joaquín Almunia, y el de Asuntos Económicos, Olli Rehn.
"Ha quedado claro que la base para tomar la decisión de cerrar el espacio aéreo, y los procedimientos en sí mismo, necesitan una urgente reforma", señaló en un comunicado el secretario general de AEA, Ulrich Schulte-Strathaus.
La Asociación, a la que no pertenecen compañías como Ryanair o Easyjet, subraya que "las empresas que han cumplido con la legislación sobre derechos de los pasajeros no deben quedar en una situación de desventaja en relación a las compañías que no lo han hecho". La CE indicó que trabajará con las autoridades nacionales para garantizar que la ley se aplica en igualdad de condiciones para todas.
La industria respira con alivio
La Asociación de Líneas Aéreas (ALA), que agrupa a unas 60 compañías nacionales y extranjeras que operan en aeropuertos españoles, mostró su satisfacción por la declaración realizada ayer por el comisario de Transportes Slim Kallas. La patronal valora el reconocimiento realizado desde Bruselas por el que se indica que no se puede imputar ni reclamar al sector de la aviación comercial ningún tipo de responsabilidad sobre la los daños y pérdidas ocasionadas por el caos aéreo vivido a causa de la nube volcánica. El presidente de la patronal, Pablo Olmeda, aseguró que la medida adoptada por Bruselas, que incluye el reconocimiento de que las aerolíneas puedan recibir ayudas en compensación por las pérdidas "es de estricta justicia". "Las empresas del sector están al límite y nadie entendería que después del esfuerzo que realizaron para repatriar a los pasajeros afectados, fueran objetivo de reclamaciones por daños".