El valor del rescate a Grecia

Portugal, Italia, Irlanda y España se podrían hacer cargo de la financiación de un tercio del rescate a Grecia por 30.000 millones de euros acordado por los países de la zona euro. Parece un montón para países que por sí mismos cargan con grandes deudas. Pero no actuar resultaría mucho más caro, e incluso pueden hacer algo de dinero en el proceso. Dicho esto, si uno de los llamados PIIGS se mete en problemas, rescatarlo sería más difícil de lo que ha sido para Grecia.

En teoría, el apoyo de Portugal, Italia, Irlanda y España podría haber empeorado sus problemas. Después de todo, los cuatro países tomarán algo del riesgo de impago de Grecia y probablemente emitirán nueva deuda para financiar sus contribuciones. Pero la reacción inmediata ha sido en realidad positiva. Los CDS de España e Italia, los dos mayores contribuyentes de los cuatro, han bajado desde el anuncio.

Eso es en parte porque los cuatro países no están aflojando mucho. Italia pondrá 5.500 millones de euros, mientras que España contribuirá con 3.700 millones. Eso incrementará la deuda de Italia en un mero 0,3% y la de España en un 0,6%. Luego está el coste de no actuar. Si Grecia cayera en el impago, las ramificaciones para los otros PIIGS serían graves. Si los costes de financiación se elevan, potencialmente entrarán en una infernal espiral de deuda.

Los cuatro amigos de Grecia pueden incluso ganar dinero con el paquete. España puede pedir prestado a algo menos del 2% en tres años. Los griegos pagarían un 5% por los préstamos, dejando un diferencial del 3%. Suponiendo que Grecia hiciese uso el primer día de todo el rescate, le reportaría a España 100 millones en un año, según su participación en el paquete. Eso sí, siempre que Grecia lo devuelva.

Pero este truco no será fácil de repetir, especialmente si un país más grande necesita ayuda. El rescate de la zona euro es alrededor del 12% del PIB de Grecia. Suponiendo una cantidad similar para España y sus socios, se necesitaría proveer alrededor de 126.000 millones de euros. Incluso si los Gobiernos estuvieran en posición de aflojar los fondos, tendrían dificultades para persuadir a los ciudadanos de que les respalden.

Neil Unmack