American Airlines se perfila como próximo objetivo del nuevo grupo
American Airlines se perfila como el próximo objetivo del grupo resultante de la fusión de Iberia y British Airways. "La alianza con American es el próximo paso en la agenda de Iberia y British en la actualidad y el acuerdo de fusión de ayer lo convierte en algo más cercano, aunque los socios probablemente también estén mirando hacia otras aerolíneas europeas y asiáticas", apuntó Stephen Furlong, analista de Davy Stockbrokers.
"Hay demasiadas aerolíneas en el mundo y, cuanto más grande sea uno, mejores posibilidades de cara al futuro. British probablemente espera que esto sea el inicio de muchas más alianzas", añadió Furlong, informa Reuters.
De hecho, Iberia y British señalaron ayer que el acuerdo al que han llegado "está estructurado de manera que facilite la participación en futuros procesos de consolidación del sector".
Iberia, British Airways y American Airlines, que forman parte de la alianza Oneworld, pretenden reforzar sus relaciones para poder aprovechar las ventajas del acuerdo de cielo único entre la Unión Europea y Estados Unidos, con el que se busca liberalizar el transporte aéreo a nivel transatlántico.
Las tres compañías, junto a Finnair y Royal Jordanian, recibieron, el pasado mes de febrero, el visto bueno provisional del Departamento de Transporte de Estados Unidos para potenciar su cooperación en las operaciones internacionales en los mercados transatlánticos.
Para el organismo estadounidense, los planes de los socios de Oneworld permitirán una reducción de las tarifas en más rutas aéreas, la prestación de un mayor número de servicios, mejores horarios y un tiempo menor en los viajes y conexiones.
No obstante, detectó posibles riesgos para la competencia en determinadas rutas entre Estados Unidos y el aeropuerto Heathrow (Londres) al limitar el número de slots para despegues y aterrizajes. Bruselas, que todavía está estudiando la propuesta, también expresó su preocupación por estas cuestiones.
Para tratar de paliar estos riesgos, las compañías se han mostrado dispuestas a hacer ciertas concesiones, como la cesión de slots en determinadas franjas horarias en Heathrow y Gatwick (Londres) y en el JFK de Nueva York para facilitar el acceso de competidores en rutas entre Londres y Nueva York, Boston, Dallas y Miami.