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Actualidad

El renting se vuelca con la responsabilidad ambiental

La incorporación de vehículos 'verdes' al sector ofrece ventajas a proveedores y clientes.

El compromiso de las empresas con el medio ambiente tiene un nuevo escenario: sus flotas de vehículos. La preocupación del ámbito corporativo por que la actividad empresarial resulte menos contaminante y reduzca su impacto en el mundo en que vivimos ha dado lugar a que las compañías proveedoras de flotas de vehículos hayan incluido en su oferta automóviles híbridos, eléctricos o con emisiones inferiores a los 120 gramos de dióxido de carbono.

Así lo refleja el Observatorio del Vehículo de Empresa (CVO) publicado en septiembre de 2009, que indica que un 12% de las empresas españolas se plantea añadir un vehículo ecológico a su flota.

A la hora de analizar cuáles son las prestaciones de este tipo de vehículos, debe tenerse en cuenta de qué tipo de automóvil estamos hablando, según explica el director de Nuevos Mercados de Arval en España, Stefano Berlenghi. En el caso de los vehículos cuyas emisiones de dióxido de carbonos son inferiores a los 120 gramos, la mayor ventaja es el ahorro de coste. Casi todos los grandes fabricantes han desarrollado modelos que cumplen esta premisa y su denominador común es el bajo consumo de combustibles fósiles.

En el caso de un solo vehículo, el ahorro puede suponer apenas unas decenas de euros, pero la cantidad de combustible que deja de gastar es mucho más elevada cuando se hacen los cálculos para toda una flota de automóviles.

Berlenghi asegura que el segundo grupo de coches es el de los que se alimentan de fuentes de energía alternativas, como gas natural, biocarburantes e, incluso, hidrógeno, que denomina "categoría laboratorio". "En algunos países funcionan bien, pero nunca han conseguido convencer al mercado de su sostenibilidad económica", afirma el responsable de Arval.

Finalmente, nos encontramos con los vehículos que se abastecen de electricidad. El directivo de Arval indica que es la categoría "por la que todos estamos apostando" y en ella se incluyen los automóviles híbridos -el Toyota Prius y el Honda Insigth, principalmente- y los puramente eléctricos.

"Está pasando una cosa muy interesante. El coche eléctrico no es una tecnología nueva porque hace 20 años ya había coche eléctrico. Lo que ocurre es que por primera vez los fabricantes y el resto de componentes de la industria están apostando por la misma tecnología", afirma Berlenghi.

Las ventajas de la utilización de estos automóviles no están tan vinculadas a los costes como en el caso de los coches con emisiones reducidas. El presidente de la Asociación Española de Renting de Vehículos (AER), Agustín García, subraya que los eléctricos son más caros porque no existe producción en serie, la oferta es muy limitada y las infraestructuras son insuficientes.

Explica que las empresas son conscientes de la necesidad de preservar el entorno y que, por ello, las compañías de renting han incorporado a su oferta estos vehículos. Pero reconoce que aún queda camino por recorrer. "Efectivamente, las firmas preguntan por este producto, pero no es algo que se venda con facilidad. En la situación actual, optan por alternativas que cuesten menos", apostilla.

Asegura que uno de los factores que está favoreciendo la introducción de los vehículos eléctricos en el mercado son las ayudas. El Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE) subvenciona hasta un 15% del importe de la compra de coches verdes por parte de las compañías del sector. La ayuda máxima para los vehículos de gas puede ser de hasta 1.200 euros por coche, de hasta 2.300 euros para los híbridos y de hasta 7.000 para los eléctricos.

Hacia unos precios más competitivos

El adjunto a la dirección regional de la empresa de renting ADL, Miguel Ángel Tejeda, explica que la cuota es mucho más cara en el caso de los vehículos eléctricos. Se debe a que el coche a pilas es más caro, así como las baterías, pero el consumo y los costes de mantenimiento son inferiores a los del resto. Por este motivo, Tejeda insiste en que los clientes deben valorar las ventajas económicas, pero la más determinante es la medioambiental. "Para las grandes empresas, es una forma de compensar la cantidad de emisiones que realizan", indica el directivo.El responsable de ADL cree que el futuro traerá nuevas oportunidades. "Muchos fabricantes desarrollarán su propia oferta de coches eléctricos. Esto supondrá una mejora en la gama y hará que los precios se vuelvan más competitivos", concluye.

Las cifras

7.000 euros de ayuda es el importe máximo que una empresa de renting puede recibir por la compra de vehículos híbridos y eléctricos.12% es la proporción de empresas españolas que utilizan servicios de renting y que están interesadas en añadir coches 'verdes' a su flota.120 gramos es el límite de emisiones de dióxido de carbono por debajo del cual un coche se considera poco contaminante.

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