EE UU da su respaldo a Grecia, pero dice que no le ha pedido ayuda financiera
La secretaria de Estado de EE UU, Hillary Clinton, dio hoy el apoyo de su gobierno al programa de austeridad de Grecia tras reunirse con su primer ministro, Yorgos Papandréu, pero señaló que el país europeo no le ha pedido asistencia económica.
"Respaldamos a Grecia y las duras medidas económicas que ha tomado" para afrontar la crisis, dijo Clinton en una comparecencia con Papandreú tras el encuentro.
Por su parte, el mandatario griego se quejó de los efectos perjudiciales de la especulación y enfatizó que es necesaria más regulación.
"La crisis financiera por la que estamos pasando en Grecia nos ha hecho muy conscientes de las fuerzas muy fuertes y a menudo sin regulación de nuestro sistema financiero", dijo Papandreú, quien se reunirá el martes con el presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
Respecto a la posibilidad de ayuda económica, Clinton aclaró que "ni el primer ministro ni Grecia han pedido nada a Estados Unidos".
Papandreu afirmó que su país necesita el apoyo de la Unión Europea para vencer a la especulación y colocar deuda en los mercados a las tasas "correctas".
La actual tasa de sus títulos, que dobla la de los bonos alemanes, es "insostenible" para Grecia y "para la moneda común", dijo. "No estamos pidiendo dinero. No queremos un rescate financiero", recalcó el primer ministro.
Grecia está inmersa en una crisis fiscal que han hecho dispararse los intereses de su deuda.
El país registró un déficit el año pasado equivalente al 12,7 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB), en lugar del rango entre el 6 y el 8 por ciento que había previsto el gobierno anterior de Grecia.
La administración de Papandreú ha presentado un plan para sanear las cuentas públicas que incluye medidas drásticas para bajar los gastos y elevar la recaudación pública.
En la comparecencia conjunta la jefa de la diplomacia estadounidense mostró comprensión por el momento "difícil" que atraviesa Grecia y elogió al primer ministro por su liderazgo para resolver los problemas fiscales y económicos.
"Entre nuestros desafíos compartidos más apremiantes se encuentra la crisis económica global, que ha provocado despidos, el cierre de negocios y vaciado las arcas públicas, tanto en EEUU como en Grecia", señaló Clinton.
Ambos también conversaron sobre el apoyo griego en Afganistán, la "integración euro-atlántica" de los países de los Balcanes Occidentales, las relaciones entre Atenas y Ankara, y las negociaciones sobre el futuro de Chipre, entre otros asuntos.