W desembarca en España con más de 400 vistas al mar
Barcelona es la primera escala en Europa de la cadena neoyorquina
Tras 10 años de singladura, el que comenzó siendo el Proyecto Vela ha conseguido convertirse en el faro que domina la playa de La Barceloneta, la aportación reciente más relevante al skyline barcelonés y uno de los puntos de interés con más futuro para la noche de la Ciudad Condal. El Hotel W Barcelona, perteneciente a la cadena neoyorquina que lleva el mismo nombre y bautizado por la población local como hotel vela, abrió sus puertas en octubre de 2009 y en estos cinco meses ha logrado ganarse también el título de buque insignia de esta firma hotelera en Europa Occidental.
La responsable internacional de la marca W, Eva Ziegler, recalca que este hotel es "perfecto en muchos niveles", entre los que destaca el diseño, sus servicios y sus posibilidades de convertirse en un punto de referencia en el estilo de vida barcelonés. "Los atractivos de la cadena W son la moda, el diseño, el entretenimiento y la música. Estos elementos están muy presentes en Barcelona", dice Ziegler, quien concluye que se trata de "una combinación perfecta".
La carta de presentación del Hotel W Barcelona es imponente. Con sus 26 pisos, su silueta puede observarse desde gran parte de la ciudad. Asimismo, las habitaciones que miran al poniente permiten contemplar la plaza de Colón y el castillo de Montjuic, y en las que tienen vistas a la zona más oriental, las playas de Sant Sebastiá, de Sant Miquel y de La Barceloneta.
Brilla también la lista de colaboradores que ha ido formando parte de este proyecto. Desde el diseño por parte de Ricardo Bofill, hasta la configuración del bar ubicado en la planta 25 por el grupo Ignite, promotor del Boujis de Londres, pasando por la creación junto al chef catalán Carles Abellán de un restaurante de autor, ubicado en la primera planta. Otro de los atractivos del hotel, además del esfuerzo de sus promotores por llegar hasta el último detalle, es el spa Bliss, especializado en servicios de belleza y que es el primero de esta marca en Europa.
Ziegler insiste en que el objetivo de la cadena consiste en crear un hotel de lujo que no se pareciera a ninguno de los que están instalados en la ciudad. "Queremos conseguir el factor guau. Tiene que ser extraordinario, fuera de la normas, sorprendente", afirma.
Los responsables de la cadena W, que forma parte del grupo hotelero Starwood, propietario de marcas con Westin y Le Méridien, aseguran que este hotel forma parte de un ambicioso plan de expansión en Europa y Oriente Próximo. En esta región cuenta con 36 hoteles, pero pretende duplicar esta cifra durante los dos próximos años.
Sin embargo, el proyecto ha visto la luz después de muchas vicisitudes, que están relacionadas con su ubicación excepcional. Está ubicado al final del paseo de Joan de Borbó, dominando la plaza de la Rosa dels Vents, prácticamente anclado al mar en la parte antigua del puerto de Barcelona. Un grupo de constructoras, ganador de la concesión del puerto de Barcelona para gestionar estos terrenos, encargó en 1999 al arquitecto Ricardo Bofill el diseño del edificio, que después se encontró con la oposición de grupos ecologistas y las instituciones, en especial por su complicado encuadre en la Ley de Costas. Resueltas las dudas sobre su legalidad, la construcción fue reanudada en 2007. En los próximos dos años estarán finalizadas las obras del área que rodea el hotel, en la que ubicarán tiendas de alto nivel y otros servicios.
El objetivo, según explicó en la presentación del hotel el presidente de la Autoridad Portuaria de Barcelona, Jordi Valls i Riera, es "seguir introduciendo actividades turísticas" en La Barceloneta. De hecho, el proyecto también está conectado con la instalación de 200 plazas para embarcaciones de recreo en la dársena más próxima al hotel.
Algunas cifras
El Hotel W está ubicado en un edificio de 26 plantas y tiene 473 habitaciones, de las cuales 67 son suites. Cuenta con 2.500 metros cuadrados de salas de reuniones y la más grande de ellas tiene vistas al mar. Con su puesta en marcha, se ha conseguido crear 400 puestos de trabajo.